Seguridad, iluminación y la recuperación de espacios públicos y educativos fueron las principales solicitudes que presentaron las y los habitantes de la colonia Cuauhtémoc, de la capital hidalguense, durante la Mesa de Acercamiento a la Población que desarrolló el gobierno de Hidalgo este martes.

Con la presencia de integrantes del gabinete de la administración estatal, funcionarios federales y pobladores, arrancó el encuentro presidido por Guillermo Olivares, secretario de Gobierno estatal, quien indicó que las mesas tienen el propósito de brindarle a la ciudadanía la apertura para expresar sus necesidades y de ser realmente atendidos por sus representantes en el gobierno.

Además, las autoridades enlistaron los diferentes apoyos y acciones emprendidas en la zona; por ejemplo, Jorge Alberto Reyes Hernández, subsecretario de la Secretaría de Infraestructura Pública y Desarrollo Urbano Sostenible, indicó que se trabaja en los drenes pluviales para desazolvar el cinturón de seguridad de la colonia.

Por su parte, Bertha Miranda Rodríguez, titular del Instituto Hidalguense de las Mujeres, expuso que 14 mujeres de la zona son beneficiarias de los programas de la dependencia; en tanto, Víctor Hugo Vidal Álvarez, secretario técnico del  Consejo Estatal de Población (Coespo), enfatizó que existe un fuerte trabajo para prevenir embarazos en adolescentes de entre 15 y 19 años.

Al respecto, Zorayda Robles Barrera, secretaria de Salud de Hidalgo, coincidió en que el embarazo de alto riesgo en adolescentes se presenta con frecuencia, por lo que resaltó que la SSH ofrece la interrupción legal del embarazo e hizo un llamado para que las mujeres se informen para poder recibir apoyo de manera que no ejerzan maternidades forzadas.

Además, el delegado del Registro Agrario Nacional, Andrés Velázquez Vázquez, se puso a disposición de la población para garantizar la protección del patrimonio familiar, mediante la obtención de escrituras y la resolución de problemas con las constancias de posesión.

En respuesta, los vecinos de la colonia expresaron sus principales inconformidades, como el alto índice delictivo, la violencia de género, el consumo de sustancias ilícitas, la necesidad de alumbrado público y mejores vialidades, así como el deterioro de un espacio público que es usado como tiradero y de las instalaciones de la escuela Revolución Mexicana, donde también hay sobrepoblación canina.

En ese contexto, los diferentes equipos de las dependencias se comprometieron a resolver las necesidades o servir de intermediarios para poder brindar atención oportuna y seguimiento; de manera particular se acordó dar limpieza al cinturón de seguridad, aumentar el patrullaje y emprender acciones para garantizar un mejor servicio de agua potable, alumbrado y bacheo.