Con aplausos, porras y cantando las mañanitas, un pequeño grupo de vecinos se reunió a la mitad de la Calle Prolongación Yucatán para celebrar los 20 años de un bache.

A las 13 horas, Tania Fernández, representante vecinal, prendió las velas y colocó al pastel en el lugar del festejado: «estamos celebrando con mucho cariño porque ya nos acostumbramos a vivir con él».

Entre las risas y el asombro de personas que pasaban por casualidad, Fernández explicó que a lo largo de esos años han tocado diversas puertas para que resuelvan esta problemática pero fueron ignorados.

«Muchos de los baches han sido fracturados por el mismo Caasim que viene, destapa y no tapa, por lo que exhortamos, a quienes se quieran sumar, a darle un nuevo rostro a esta calle».

Previo a terminar esta «iniciativa social», fuerzas municipales acudieron al lugar, y sus gestos se confundieron entre el enojo y la risa al saber que el cierre vial fue por la celebración de un bache y no por el aniversario de la calle.