Por: Bethel García Vargas

En ocasiones anteriores he expresado varias opiniones respecto al transporte público que se dirige a mi colonia, Bosques del Peñar, y sé que no es la única que presenta atrasos o deficiencias. En esta ocasión les compartiré otra anécdota de esta semana.

Hace algunos meses se dio el caso del atropellamiento de una mujer en la parada de atrás de Palacio de Gobierno, en el que una combi la arrolló y el accidente desencadenó en el fallecimiento de la señora. Leí comentarios relativos a que los conductores de esa ruta siempre van muy rápido, incluso van “jugando” a las carreritas, con lo que ponen en riesgo a los pasajeros, la ruta fue una Providencia-Centro, las verdes con amarillo y casualmente tiene coincidencia con lo que me sucedió el día viernes a las 18.00 horas.

Me encontraba en el cruce de Niños Héroes, esperando que el semáforo cambiara de color a rojo y se activara el siga para el peatón, precisamente esperando en el paso de cebra que se coloca, verifiqué que no vinieran más coches cuando se colocó el rojo e incluso el Tuzobus se detuvo por el semáforo, cuando intento cruzar y antes de seguir, se pasa derecho una combi de la ruta Providencia-Centro y casi me atropella aún estando el semáforo el rojo, se pasó el alto y ni siquiera hizo el intento por frenarse, cabe resaltar que no era la única persona cruzando, también iba cruzando una familia con un niño pequeño que tuvimos que detenernos para no ser embestidos por esa unidad.

La cultura vial que se tiene tanto de automovilistas y trasportistas como peatones, es deficiente, todas esas cosas que se deben saber y hacer al cruzar calles o al manejar deberían ser fundamentales para evitar todo este tipo de accidentes o incidentes que se llegan a presentar de forma seguida en nuestra ciudad, y no siento que eso debe enseñarse cuando ya son adultos, sino es algo que debe venir desde pequeños, el voltear a ambos lados antes de cruzar, conocer las señalizaciones, los lugares destinados a cruzar, y para los automovilistas/trasportistas y todos aquellos que manejan un vehículo dentro de la ciudad, respetar el alto, la forma de rebasar, no colocarse en los pasos peatonales, aunque no haya coches del otro lado, no pasarse los altos o invadir pasos de cebra, siempre hay personas que cruzamos por lo que deben señalar si van a dar vuelta, como leí en una publicación de un conocido, esas luces no se ven reflejadas en el recibo de la luz ni gastan gasolina.

Esta ocasión pude salir ilesa por verificar que no vinieran más coches, pero hay personas que no corren con la misma suerte, vuelvo hacer un llamado a los concesionarios que no le den las rutas a cualquier persona que dice saber manejar, porque sabrán mover un coche, pero no respetan a los pasajeros al conducir a gran velocidad y los ponen en peligro, no respetan los coches y muchas veces ni siquiera siguen rutas que deben ser, se las brincan para llegar más rápido a su destino y muchas veces se enojan con los pasajeros. Esta semana igual me quisieron bajar en un lugar donde no había banqueta y casi al mismo tiempo pasó del lado derecho un motociclista por el arroyo donde pensaban descenderme, se molestó el chofer, pero me bajó donde le pedí y sin el peligro de ser atropellada por otro vehículo.

Los invito a manejar de forma más consciente y respetuosa con los peatones, automovilistas y pasajeros. Hasta la próxima y recuerden tomar mucha agua por la onda de calor.
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