Interesante, por decir lo menos, lo que ocurrió en España el 28 de mayo durante las elecciones. El PSOE en el poder perdió 9 de las 13 regiones de ese país. Ha tenido que convocar a elecciones generales anticipadas para elegir a un nuevo gobierno para el próximo 27 de julio.

Sin lugar a dudas, la gran perdedora ha sido Irene Montero, la ministra deigualdad, quien impulsó polémicas leyes como la de identidad sexual y la de “sólo sí es sí”, a pesar de que las feministas le advirtieron de varios riesgos. En el reacomodo para presentarse a las generales, partidos, corrientes y grupos, la han dejado fuera, no la quieren cerca.

Estas leyes que Montero impulsó se parecen mucho a lo que en México llamamos “operación tamal”. Es una trampa que se usó mucho en las elecciones, cuando el PRI gobernaba.

Operadores del partido en el poder acudían a votar. El funcionario electoral les daba su boleta, pero entre las ropas llevaban cinco o diez más ya marcadas, las doblaban muy bien y las metían todas juntas a la urna. Así diseñan sus leyes las izquierdas, una o dos cosas buenas, con las que todo el mundo está de acuerdo, pero van junto con otras medidas o acciones francamente riesgosas o antidemocráticas.

Acá en México, el presidente y su partido MORENA propusieron hace poco reformas a la ley electoral, con este mismo truco. Que baje la cantidad de diputadas y diputados, además de menos dinero para los partidos políticos, pero junto con ello la determinación de que el Instituto Nacional Electoral (INE), pierda su carácter ciudadano y el control sobre padrón electoral.

Y entonces se llenan la boca diciéndonos qué ¡como es posible que no estemos a favor de menos diputados y disminuir el presupuesto para los partidos!, pero lo antidemocrático ni lo mencionan.

Regresando a lo de España, por supuesto el panorama es complicado, por eso le pregunté a mi querida maestra la abogada granadina María Martín Barranco su opinión. María es fundadora de la primera escuela virtual de empoderamiento feminista.

MC: ¿Cómo viste las elecciones?

MM: Con dolor, pero sin sorpresa. Todos los partidos mayoritarios han abandonado a las mujeres y sus necesidades específicas para volcarse en políticas identitarias que no tendrían porqué haber solapado nuestros derechos y quienes han ejercido su derecho democrático a la crítica solo han obtenido amenazas, insultos, calumnias, vejaciones y una pared de indiferencia absoluta. Tampoco me ha sorprendido la incapacidad de hacer autocrítica ni la ausencia de análisis. Su cantinela ya aburre: “sois las culpables de que llegue la ultraderecha, votáis mal, sois malas”. Quienes toman decisiones políticas tienen que asumir las consecuencias. Y las consecuencias es que los votos se tienen que ganar y una vez ganados se pueden perder, sobre todo con un gobierno que no nos ha querido escuchar. Creían que después de cuatro años de maltrato nos íbamos a conformar.

MC: ¿Cuál es tú análisis?

MM: El feminismo es básicamente un movimiento de izquierdas porque es humanista y universalista. Además, es un movimiento emancipatorio. Ahora falta demostrar que la izquierda de este país (y de otros muchos) sea de verdad feminista, porque no son feministas quienes defienden la explotación de las mujeres (sea sexual o reproductiva) quienes nos empujan a los cuidados y anteponen los intereses ajenos a los propios, quienes nos obligan a esconder nuestra biología, no son feministas quienes creen que los estereotipos son nuestra identidad. ¿Cómo va a ser emancipatoria una ideología que me
impone una identidad en base a la fe, al sentimiento, a la creencia personal en algo que se sabe que está, pero no se sabe qué es ni nadie puede definir?

MC: ¿Qué crees que pasará?

MM: Sí, los partidos de izquierda no abandonan sus políticas neoliberales e identitarias, la ultraderecha va a ganar. Mientras, las mujeres sabemos que hoy por hoy, ganen unos o ganen otros, nos irá mal. Pero a pesar de todo, no pueden detenernos, es sólo un retraso.

El patriarcado es una bestia moribunda y morirá matando, tiene milenios de práctica.

Nosotras tenemos también una práctica milenaria: la supervivencia frente a la opresión.
¡Ganaremos juntas!

Seguiré con mucha atención lo que ocurra allá de aquí al 27 de julio.

botellalmar2017@gmail.com