Por: Carlos R. Muñoz Moreno 🖊️

En un hecho que por años fue minimizada y que, en esta administración donde Julio Menchaca Salazar ha impulsado una nueva forma de trabajar, es ahora retomada con relevancia la republicana costumbre de que las y los secretarios acudan al Pleno de la Cámara de Diputados a comparecer respecto de la Glosa del Informe de Gobierno que año con año el mandatario estatal debe presentar ante el poder legislativo y, no ya, en un acto casi desapercibido por la ciudadanía, en la sala de la Comisión Permanente.

Y, en ese tenor, quien ha reinaugurado esta sana y democrática práctica, ha sido el secretario de Gobierno, Guillermo Olivares Reyna que, en una cuidadosa y consensuada comparecencia, con el respaldo de importantes figuras estatales, acaldes, compañeros del gabinete, delegados federales y representantes de la sociedad civil organizada.
¿Qué significa esto en términos de gobernabilidad y gobernanza? Que esta nueva administración, que apenas cumple su primer año de gestión, está enfocada sobre todo en la inclusión, en la democratización del ejercicio de gobierno que, si bien recibió un mandato de la ciudanía, entiende la responsabilidad de ser incluyente, plural, de responderle al pueblo que en las urnas le dio la confianza para emprender nuevas formas de ser gobierno y de entender la política.

Habrá quienes señalen que faltaron datos duros, sólidos, que durante tres horas algunos diputados solo intentaron hacerse notar frente al secretario y que cuestionaron a modo; sin embargo, otros sí alzaron la voz e hicieron los cuestionamientos incómodos a los que Olivares Reyna respondió de manera puntual y bien preparado.
El segundo a bordo de esta administración, responsable de iniciar la transformación que inició en Hidalgo hace un año, expuso sus evidentes logros, reconoció las lagunas y los obstáculos que aún enfrenta, y si bien en los mismo términos que el Presidente López Obrador señaló las pesadas herencias del pasado, también mostró la disposición de arremangarse la camisa y ponerse a hacer la llamada “talacha política”, que implica negociar, llegar a todos los sectores, dejar las oficinas y hacer trabajo “ a ras de tierra”.

Reconocer que enfrentan grandes retos es el primer paso de un diagnóstico realista en base a la cual se ha trabajado y seguirá haciéndolo, a menos que las legítimas ambiciones de crecimiento político lo lleven a buscar el senado, el congreso local o el federal; y si eso ocurriera, su comparecencia no sólo mostró que ha dejado el camino preparado para seguir construyendo, sino que además cuenta con el respaldo de la sociedad y los sectores gubernamentales para emprender nuevas aventuras.
Poner el tema de seguridad entre los temas prioritarios fue un reconocimiento de los retos a enfrentar ante la necesidad y el reclamo de las y los hidalguenses por estar tranquilos, retomar las calles, reapropiarse del espacio público y vivir sin miedo.

El Mando Coordinado como herramienta para el trabajo conjunto, los Consejos Municipales de Seguridad, la correcta aplicación del Fondo de Aportaciones para el Fortalecimiento Municipal en materia de seguridad pública, las labores del Secretariado Ejecutivo del Consejo Estatal de Seguridad Pública, la capacitación y certificación policiaca, fueron, de manera tácita y explícita temas de peso para cristalizar el objetivo de dar paz a las y los hidalguenses, ya que no se esconde ni se evita el hecho de que, por ejemplo, el alza en la incidencia delictiva, durante el primer cuatrimestre de 2023, en Hidalgo registró un incremento de 9.3 por ciento respecto al mismo periodo del año anterior, de acuerdo con el reporte estadístico del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP).

De allí el compromiso y la firmeza en el llamado a las y los titulares de los ayuntamientos para seguir trabajando juntos, de comprometerse, más allá de los colores, a una colaboración institucional en favor de la ciudadanía.
Un ejemplo ha sido, ante el incremento de los delitos de violencia sexual, en especial hacia las mujeres, los 22.5 millones de pesos transferidos al Instituto Estatal de las Mujeres, donde existió un incremento del 40% a su presupuesto.

Así, en esta nueva etapa donde la rendición de cuentas parece ir en serio, Guillermo Olivares Reyna cosechó una tanda de olivos al inaugurar con éxito y buenos augurios esta etapa de gobierno, de cara al pueblo y a los otros poderes del estado.
¡Un abrazo a la cuatitud!