El diputado del Grupo Plural Independiente (GPI), Julio Valera Piedras, llamó al Congreso a sumarse a una colecta en beneficio de los damnificados que dejó el huracán Otis tras su paso por el estado de Guerrero, por lo que dispuso las oficinas del GPI para la recepción de víveres a partir de hoy, hasta el viernes 3 de noviembre.
La recaudación se realizará en avenida Canal 101, colonia Ampliación Santa Julia de la capital hidalguense, los horarios de atención son de 10:00 a 16:00 horas; sugirió que la población done productos no perecederos como agua embotellada, suero en polvo, leche, aceite, frijol, atún, sardinas, azúcar, sal, chocolate en polvo, productos de higiene personal, papel higiénico, toallas femeninas, cobijas, cloro y jabón.
El legislador señaló que es importante poner dentro de la agenda legislativa a la gente que ha sufrido los estragos del desastre natural y puedan ser auxiliados.
En este ámbito el presidente de la Junta de Gobierno, Jesús Osiris Leines, propuso al Pleno para que el Congreso estatal se habilite como centro de acopio para la recepción de víveres a partir del día de hoy y se sume a los 4 que dispone el gobierno estatal.
Leines expuso que tras obtener contacto con la presidenta del Congreso estatal de Guerrero le indicó que los productos que solicitan son atún, sardina, frijol, aceite, arroz, lentejas, artículos desechables, manteca, sal, así como pasta de dientes, cepillos dentales y toallas femeninas.
Se pretende que la recepción de los apoyos se realice durante el fin de semana, por lo que se colocará una lona en la entrada general de la Cámara de Diputados para que personal de seguridad reciba los donativos.
El morenista Timoteo López Pérez propuso ante el Pleno que el cincuenta por ciento del salario de su bancada se disponga a beneficio de los afectados “en tiempos de tragedias es mezquino hablar de cuestiones políticas aduciendo falta de apoyo”, expresó.
De acuerdo a la información emitida por el Servicio Meteorológico Nacional (SMN), en lapso de nueve horas, el huracán Otis pasó de ser tormenta tropical a huracán categoría cinco y tocó territorio nacional la madrugada del 25 de octubre e ingresó por las costas del Pacífico. El fenómeno causó destrozos y 27 muertes en el estado de Guerrero, de acuerdo a información otorgada por Rosa Icela Rodríguez, titular de Seguridad y Protección Ciudadana del País.