El 21 de marzo al mediodía, la zona arqueológica de Tzacuala será sede de una ceremonia para pedir permiso a los cuatro rumbos, como parte del equinoccio de primavera.

Acaxochitlán recibirá a los viajeros quienes podrán llevar semillas para el altar que se instalará en la zona, ser parte de una actividad sensorial y presenciar la entrega de bastones de mando y de diversos bailes de la región, afirmó Fulgencia Vargas Vargas, vigía del Patrimonio Cultural del municipio.


José Valentín Santos, guardián de la zona arqueológica de Tzacuala, narró que él llegó hace 20 años porque se casó con la hija de Don Jovito y con el paso de los años descubrieron que debajo de ellos estaba una réplica chiquita de Teotihuacán


Por su parte, Felicia Tlalacalxo, mujer médica, comentó que están rescatando la medicina tradicional por lo que pondrán una ofrenda y degustarán de una bebida ancestral hecha a base de chocolate caliente, piloncillo, café y canela, acompañado de pan.