El área de Toxicología del Hospital General de Pachuca recibe entre 18 y 22 personas con picaduras de víboras y araña al mes; la temporada de mayor incidencia de picaduras o mordeduras de animales ponzoñosos es en verano.
De acuerdo con Omar Azuara Antonio, especialista del IMSS Bienestar, en el General de Pachuca existe una alta incidencia de mordeduras de víboras de cascabel, con un promedio de 10 a 12 pacientes al mes, provenientes de la periferia de Pachuca, como Mineral de la Reforma y San Agustín Tlaxiaca.
Respecto a las picaduras de arañas, explicó que la incidencia abarca desde el verano hasta inicios del invierno, con ocho a diez pacientes por mes; por lo que recomendó sacudir el calzado y ropa, ya que las arañas capulina y violinistas, así como alacranes, pueden anidar en ellos.
En caso de sufrir una mordedura o picadura, Azuara Antonio sugirió lavar el área afectada, inmovilizar la extremidad, sea mano o pie, manteniéndola en una posición neutra para evitar la distribución del veneno; y acudir a una valoración médica a la unidad de IMSS Bienestar más cercana.
“En el Hospital General de Pachuca contamos con todos los antídotos para neutralizar la sustancia tóxica”, explicó el especialista al referir que los pacientes se mantienen en observación, de cuatro a 72 horas, dependiendo del grado de intoxicación.
En el área de Toxicología, agregó, se brinda atención gratuita a intoxicaciones causadas por fármacos, agroquímicos, plantas, hongos, drogas de abuso, así como por picaduras o mordeduras de animales ponzoñosos.
Finalmente, recordó que el pasado miércoles 17 de julio, se atendió a un paciente de 54 años de edad por mordedura de víbora coralillo, la cual sucedió cuando laboraba en el campo.
El paciente, originario del municipio de Atotonilco el Grande, recibió la atención médica necesaria y aplicación del antídoto correspondiente. Actualmente se reporta asintomático y hemodinámicamente estable.