Ejidatarios de Epazoyucan e integrantes del «Colectivo 16 de octubre» sostuvieron una reunión en el que dicha organización los exhortó a reflexionar respecto a la instalación de paneles solares y parques fotovoltaicos al considerar que dichas empresas no aportan en los ámbitos social, económico, social y ecológico.

Raúl Domínguez, representante de la asociación, aseveró que mediante argumentos teóricos y de observación, los daños de las empresas en las tierras y parcelas son irreversibles, tras indicar que existe contaminación en diferentes niveles, iniciando desde el desmonte de magueyes y cactáceas. Agregó que, al trabajar mediante sistema automático, tampoco brindan empleo a la población.

Explicó que a cinco años de la construcción de la planta fotovoltaica «Guajiro» en Nopala no se han obtenido resultados favorables a la población cercana, justificando que ha aumentado el nivel de radiación solar y justo en ese punto no existen nubes y se ha extendido la desertificación.

El activista manifestó que debido a la instalación de dicha planta, han sido siete municipios los afectados, cuatro de ellos en el Estado de México y tres hidalguenses como Chapantongo, Huichapan y Nopala, por el panel solar que abarca 480 hectáreas.

El colectivo informó que según la experiencia de quienes viven cerca de ese tipo de parques fotovoltaicos, ha aumentado la temperatura.

Domínguez precisó que en municipios como Epazoyucan se presume que instalarán un parque de 450 hectáreas y en dónde deforestarán miles de magueyes que son plantas que benefician al medio ambiente. Ante ello, asumió que es necesario favorecer a la vegetación.

Representantes de dicha organización conformada por ejidatarios de Querétaro, Michoacán, Guanajuato, Estado de México y Tlaxcala han acudido a dichas entidades donde también se ha compartido el mensaje.

Un ejidatario se retiró del lugar al no estar de acuerdo con el planteamiento debido a que carece de argumentos científicos, por lo que pidió a los ponentes fundamentar su planteamiento.