De enero a julio del presente año, personal de la Secretaría de Contraloría de Hidalgo llevo a cabo más de mil 200 visitas de inspección a las distintas obras públicas que ejecuta el gobierno estatal.

De acuerdo con Álvaro Bardales Ramírez, titular de la Contraloría, el proceso de supervisión a las obras ya finalizadas se coordina estrechamente con las entidades ejecutoras, que incluyen presidencias municipales, dependencias y contratistas.

Dichas inspecciones, explicó, se desarrollan en dos fases clave: la primera consiste en una revisión documental en la que se analiza detalladamente el expediente unitario de cada obra, que incluye especificaciones técnicas, montos y metas.

«Durante la segunda fase, la inspección física involucra una supervisión detallada de cada aspecto de la obra. Si se cumple con los estándares establecidos, se firma el acta de entrega-recepción, con lo cual se valida el cumplimiento de las metas. De no ser así, se elaboran minutas con las observaciones necesarias para corregir las deficiencias detectadas», agregó.

Además de las supervisiones, la dependencia también atiende quejas ciudadanas respecto a las obras públicas, pues «esta apertura es crucial para fortalecer el combate a la corrupción y asegurar la transparencia en el uso de los recursos públicos», indicó Bardales.