Inundaciones, tráfico vehícular, personas corriendo en busca de un refugio y otras más sacando el agua de sus negocios fue la consecuencia de la fuerte lluvia que se vivió en la capital del estado.

Las zonas que tuvieron problemas de encharcamiento fueron el primer cuadro de la ciudad, el bulevar Minero, calle Ferrocarril Central, Santa Julia, Felipe Ángeles, Avenida Juárez, Ramón G. Bonfil a la altura de los Campos de Santa Julia, Nuevo Hidalgo, calle Hidalgo y Leandro Valle, colonia Centro; en la calle Tomas Devereux Sánchez y Lic. Javier Rojo Gómez, en la colonia Santa Julia.

Elementos de Tránsito y Vialidad, Policía Preventiva y Protección Civil Municipal, implementaron dispositivos viales y de emergencia a través del monitoreo táctico del C4.

Cerca de las 16:00 horas, las nubes grises oscurecieron la ciudad y arrojaron fuertes gotas y granizo que provocó la huida de personas de la calle; algunas con paraguas en mano y otras totalmente empapadas.

Más de media hora de lluvia hizo que las calles del centro histórico se inundaran de aguas negras, provocando que los autos y las personas se movieron con dificultad, pues el agua llegaba unos centímetros abajo de la rodilla.

Mientras en Ocampo el agua fluía como río en dirección al Reloj Monumental, los empleados de la calle Hidalgo arrojaban cubetazos de agua de lluvia a la calle después de que este llegara con la subida de nivel.

Los policías también realizaron el operativo carrusel por los bulevares Colosio y Felipe Ángeles para que los automovilistas disminuyeran la velocidad en asfalto mojado y evitaran algún incidente.