Tania Meza, diputada del Congreso Local, afirmó que se ha difundido una gran cantidad de mentiras en torno a la reforma judicial, principalmente que cualquier persona sin capacidad, preparación y experiencia podrá ser Juez o Magistrado y que será el partido guinda quien los elija.

Precisó que la reforma estipula que existirá un Comité técnico de evaluación, integrado por especialistas, tal como se hace para elegir diversas Consejerías en otros organismos, y ése es sólo uno de varios filtros. Además “la Presidencia de la República le está dando todo el poder al pueblo”.

“Aunque desde hace mucho tiempo elegimos al ejecutivo y al legislativo, la derecha conservadora dice que el pueblo no será capaz de elegir a sus jueces y magistrados. En realidad, tienen miedo de que el pueblo decida y miedo a perder sus privilegios, pero sobre todo, los conservadores tienen miedo a que decidan las personas a quienes la derecha siempre ha despreciado y minimizado”, afirmó la legisladora.

Añadió que el proceso para elegir a los nuevos jueces y magistrados no será caro e incluso será menos del valor de los fideicomisos y fondos secretos, cuyo monto exacto se desconoce, porque se rigen por el secreto bancario, pese a estar constituidos por dinero público.

También, dijo, es mentira que la reforma afectará los derechos de las y los trabajadores del poder judicial, ya que con ella se acabarán los privilegios y con ese dinero se garantizarán las prestaciones y derechos de las y los trabajadores del poder judicial. “Les vamos a quitar a los de arriba, para darles a los de abajo”.

La legisladora local refirió que, decir que esta reforma busca la demolición del poder judicial, es un despropósito y la oposición lo sabe, dijo, pero después del mensaje contundente que el pueblo de México dio el pasado 2 de junio, a la derecha ya sólo le queda mentir.

“No alcanzan a ver que el pueblo está informado, que el pueblo está politizado, por eso México sabe que la reforma es solamente una manera diferente de redistribuir el financiamiento público y de nombrar a jueces y magistrados. El pueblo sabe que democratizar al poder judicial es legitimarlo, y es garantizar el derecho de la gente a la real y auténtica impartición de justicia”.