Comisión Estatal de Derechos Humanos de Hidalgo
Dando seguimiento a esta serie de columnas que relatan los principios de los derechos humanos, en esta entrega hablaremos del principio de “progresividad” el cual establece que los derechos deben avanzar —hacia adelante— de manera constante, logrando mejoras graduales en la protección, garantía y realización de los derechos, sin retrocesos.
Este principio, reconocido en tratados internacionales como el Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales (PIDESC), compromete a los Estados a adoptar medidas para que los derechos se amplíen y fortalezcan con el tiempo, adaptándose a los cambios sociales y económicos y atendiendo siempre a los contextos de cada comunidad.
¿Qué implica la progresividad?
La progresividad significa que los países y sus instituciones deben trabajar de forma continua para mejorar el acceso y la protección de los derechos humanos, sin disminuir o retroceder en los niveles alcanzados. En otras palabras, una vez que se ha alcanzado un cierto nivel de derechos, este no puede perderse; por el contrario, el objetivo es siempre avanzar. La Comisión de Derechos Humanos del Estado de Hidalgo (CDHEH), por ejemplo, tiene la responsabilidad de velar porque los derechos de todas las personas en el estado se incrementen en términos de acceso, garantía y respeto.
Ejemplos de progresividad en acción
Un ejemplo claro de progresividad es el derecho a la educación. En México, el derecho a la educación ha evolucionado significativamente: desde garantizar la educación básica obligatoria, se avanzó hasta incluir la educación media superior y, más recientemente, la obligatoriedad de la educación superior. Esto refleja un progreso en el acceso a la educación, permitiendo que más personas puedan desarrollarse plenamente. Sin embargo, el principio de progresividad implica que el trabajo no termina ahí; es necesario seguir mejorando aspectos como la calidad educativa, la inclusión de nuevas tecnologías, y el acceso a la educación en comunidades y zonas de dificil acceso.
Otro ejemplo es el derecho a la salud. Las políticas de salud pública deben orientarse a mejorar constantemente los servicios médicos, asegurar que sean accesibles para toda la población y abarcar nuevas necesidades de la sociedad, como la atención a la salud mental o el tratamiento de enfermedades emergentes. La progresividad también exige que se eliminen barreras económicas y sociales que impidan el acceso a servicios de salud, garantizando que cada vez más personas puedan ejercer plenamente este derecho.
Los retos de la progresividad en tiempos de crisis
El principio de progresividad enfrenta desafíos importantes, especialmente en contextos de crisis económica, social o sanitaria. Por ejemplo, durante la pandemia de COVID-19 muchos países enfrentaron dificultades para mantener los niveles de acceso a la salud y la educación. No obstante, el principio de progresividad establece que incluso en tiempos difíciles, los Estados deben evitar retroceder en los derechos alcanzados y, en la medida de lo posible, buscar alternativas que permitan seguir avanzando.
En Hidalgo, este principio es clave para garantizar que todos los avances en materia de derechos humanos se mantengan y mejoren con el tiempo, sin importar las circunstancias; las Recomendaciones que emite este organismo autónomo defensor de los derechos humanos buscan, justamente sentar precedentes para el avance de los derechos y evitar que se repitan violaciones a los mismos. Asimismo, desde la CDHEH trabajamos para sensibilizar a la población sobre sus derechos y sobre la necesidad de exigir su cumplimiento y mejora constante.
El principio de progresividad nos recuerda que los derechos humanos no son un destino final, sino un camino continuo hacia una sociedad más justa y equitativa. Cada avance, cada nueva política, cada acción encaminada al beneficio de los derechos de las personas es un paso hacia adelante, y estos logros deben consolidarse y expandirse sin retrocesos. Desde la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Hidalgo, reafirmamos nuestro compromiso con el avance constante de los derechos humanos, asegurando que cada persona que vive, transita o se desarrolla en Hidalgo pueda ejercer sus derechos plenamente, en un entorno que respete y valore su dignidad humana.
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Referencias
Asamblea General de las Naciones Unidas. (1966). Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales.
