El Día de Reyes es la fecha más esperada del año para los panaderos locales quienes reconocen este día como una oportunidad para activar sus ventas por medio de la tradicional rosca de Reyes.

Sin embargo, de acuerdo con el sector panadero de Pachuca, este año el reto más fuerte son las grandes industrias comerciales.

“La gente que vivía en las colonias estaba acostumbrada a venir al centro pero ahora en sus colonias existen tiendas grandes y mientras hacen el super aprovechan para comprar”, comentó uno de los panaderos.

Una panadería tradicional del centro de la capital hidalguense, lleva 74 años horneando roscas, este día de Reyes reportó una baja en las ventas, lo que ha obligado a reducir los precios de sus productos.

“Tuve que hacer ajustes, la rosca chica que estaba ofreciendo en 150 pesos la bajé a 100, y una grande de 700 la reduje a 550, también para que salga”, afirmó el dueño.

Un elemento distintivo de esta panadería es su método artesanal, sus roscas son horneadas en un horno de tabique, y la preparación de la masa se realiza desde cero, requiriendo al menos ocho horas de dedicación.

A pesar de esta calidad, el comercio local enfrenta una gran presión debido a la competencia de cadenas comerciales, revendedores, chefs y particulares que también ofertan este tradicional platillo, lo que provoca pérdidas considerables en su producción