El diputado del PRI, Marco Antonio Mendoza, exhortó a la Presidencia Municipal de Tulancingo a que se realice el desazolve del Río Grande y su caudal a efecto de prevenir inundaciones en esta época de lluvia.
Mendoza Bustamante señaló que la solución podría recaer en que se realice la limpieza y remoción de forma constante de obstrucciones en el sistema de drenaje y alcantarillado para asegurar su correcto funcionamiento.
Explicó que el Río Grande de Tulancingo es la corriente superficial más importante de la región y se une con otros afluentes y no está acanalado en su totalidad, por lo que sigue siendo propenso a inundaciones.
Sin embargo la situación de dicho cuerpo de agua es compleja debido a que cuenta con problemas de contaminación y riesgo de inundaciones en zonas urbanas.
El legislador recordó que debido a los remanentes del huracán Erick, generaron alerta en 32 municipios vulnerables a deslaves e inundaciones, uno de ellos es Tulancingo, el cual consideró que tiene mayor vulnerabilidad por su ubicación geográfica.
Dijo que con las últimas lluvias, en la demarcación se registraron inundaciones severas en las colonias Insurgentes, Nuevo Tulancingo y Caltengo, en donde el agua alcanzó niveles que dificultaron el paso peatonal, causando daños en viviendas y vehículos.
El exdiputado federal recordó que las inundaciones más significativas se registraron en 1944, 1955, 1999 y en 2007, siendo las dos últimas las más recordadas por su intensidad al causar daños significativos.
El presidente del CDE del PRI, puntualizó que este llamado se realizó a las autoridades correspondientes a petición de la demanda de vecinos que solicitaron ayuda.
