Con el Club León entrenando en las instalaciones de la Universidad del Futbol en Pachuca, arribó el joven mediocampista Iván Ochoa, canterano surgido de los Tuzos que se encontraba jugando en el Everton de Chile y que llegó a los Esmeraldas para reforzarlos durante esta temporada.
Ochoa se mostró contento por regresar al futbol mexicano, y llega con la idea de sumar y aportar al conjunto de La Fiera, porque ya tiene un año que no clasifica a la liguilla el elenco guanajuatense, “esperemos sumar para llegar a eso”.
Reconoció que hay mucha calidad en el medio campo del equipo, con mucha competencia interna buena, lo que hace buen grupo y hace bueno al jugador para exigirse al máximo en cada entrenamiento.
Ochoa se considera un jugador técnico en el terreno de juego, con juego ofensivo y defensivo, para darle orden al equipo.
Recordó que estuvo desde fuerzas básicas en Pachuca, de donde salió a los Mineros de Zacatecas y después recaló en el futbol chileno en el Everton de Viña del Mar, para ahora retornar como refuerzo del elenco leonés, “es un salto de calidad el venir a demostrar lo que he aprendido y he sumado para demostrarlo acá”.
Habló sobre el futbol chileno, que detalló es un futbol diferente, con muchas características que cambian, “conozco el futbol de acá, conozco el futbol de allá y sé que características hay que tener, y bueno, venir con esa mentalidad para venir a romperla”.
Con la gente de León molesta por estar fuera un año de las liguillas, Ochoa manifiesta que como jugador no ve como un peso esa presión, sino más como un reto y un desafío el quererse mostrar, haciendo las cosas bien y mostrándolo adentro de la cancha.
Consideró que la gente está dolida porque viene de varios títulos y de estar peleando campeonatos, por lo que la gente que viene al equipo está para sumar su grano de arena para conseguir eso otra vez.
