Las empresas hidalguenses, micro y pequeñas en su extensa mayoría, no están en condiciones de generar los empleos que pudieran solicitar migrantes centroamericanos en su paso por el país, como ha pedido el presidente de la república, Andrés Manuel López Obrador.
Atender el llamado presidencial dependería, además, del grado de preparación académica o habilidades para el trabajo de estas personas.
“Tratándose de gente muy capaz, preparada o capacitada, muy productiva, indudablemente que yo como empresario, que busco ofrecer calidad a mis clientes, me interesaría contratarla, pero si se trata de personas que quieren trabajar de lo que sea, porque no tienen preparación, sería muy difícil hacerlo”, aseguró Edgar Espínola Licona, presidente del Consejo Coordinador Empresarial en Hidalgo (CCEH).
Además, por su condición de movilidad, sería incosteable para las empresas ofrecerles capacitación para el trabajo, cuando su objetivo es desplazarse a los Estados Unidos.
El presidente López Obrador reiteró este viernes su llamado a los sectores productivos para que ofrezcan empleos a los migrantes que se encuentran en México, tanto centroamericanos como asiáticos, caribeños y africanos, para que puedan costear sus necesidades mientras resuelven su situación migratoria.
“No se trata de cuestiones xenofóbicas ni racistas; simplemente las empresas necesitamos ser altamente productivas para poder competir en el mercado, y para serlo necesitamos gente capacitada”, aseguró a su vez el presidente de la Cámara Nacional de la Industria del Vestido (Canaive), delegación Hidalgo, Gonzalo Ramírez Rasgado.
En la industria del vestido se requiere capacitar frecuentemente a los trabajadores pero esta capacitación resulta costosa para una empresa, y una pérdida cuando se capacita a una persona que, poco después, abandona la empresa, hizo notar el representante de este sector.
Es el caso también de la industria restaurantera, en donde el personal, incluso el lavaplatos, debe estar capacitado para aplicar una técnica que garantice calidad en su trabajo, rapidez y eficiencia, comentó a su vez ña hotelera y restaurantera Rosa María Juárez.
Los sectores productivos coinciden en hacer notar que el principal factor en contra para la contratación de migrantes es su movilidad; además, las empresas necesitarían recibir una garantía oficial sobre la honestidad de las personas indocumentadas, pues generalmente se condiciona la contratación a que los aspirantes presenten cartas de recomendación y experiencia laboral.
Los propios empresarios aceptan, también, que existe la necesidad de que los migrantes que se encuentran en el territorio nacional desarrollen actividades laborales que les permitan atender sus necesidades, sin esperar que estas sean totalmente satisfechas por el gobierno mexicano y con recursos del erario.
