Octavio Castillo Acosta, rector de la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo (UAEH), actualizó y publicó la carta de no represalias que fue solicitada por las y los estudiantes en paro de actividades.

A dos días del diálogo que entablaron autoridades universitarias y representantes del alumnado en protesta, el primer académico publicó el documento actualizado con el fin de “propiciar un clima que facilite el diálogo universitario, la mediación y la solución entre las partes”.

En ese sentido, Castillo Acosta asumió públicamente el compromiso para que no se den o existan ningún tipo o clase de represalias de índole académica, profesional o personal, física o psicológica, en contra del estudiantado.

De acuerdo con el escrito, la comunidad académica no debe prohibirles la entrada al aula a los universitarios, asentar una calificación injustificadamente, registrar faltas con el estudiante presente, rechazar la entrega de trabajos presentados en tiempo y forma o negar al universitario su participación en clase; o de manera indirecta, solicitar tareas excesivas o aplicar exámenes imposibles.

En el caso de los administrativos, estos tienen prohibido no reconocer al estudiante como miembro del grupo, expulsarlo injustificadamente, no entregarle su documentación o negarle el acceso a eventos.

Mientras que, el personal de la UAEH no debe hacer burlas, críticas, mofa de la personalidad de los universitarios; ejercer violencia en cualquiera de sus formas, así como acoso sexual o de otra índole, actos de intimidación o amenazas.

En el ámbito laboral se considerarán como represalias la disminución de carga de trabajo, la aplicación de descuentos injustificados, el levantamiento de actas de extrañamiento u hostigamiento.

Cabe precisar que, en caso de incurrir en los actos antes mencionados, se sancionará al miembro del personal, funcionariado o estudiantado conforme a la normatividad universitaria siempre y cuando los hechos de represalia sean plenamente probados ante la instancia competente de la UAEH, previo procedimiento y a partir de la queja o denuncia de la persona o personas afectadas.