Una de las violaciones graves a la dignidad e integridad de las personas es la tortura, que es definida por el artículo 1º de la Convención contra la Tortura y otros Tratos o Penas Crueles, Inhumanos o Degradantes, como “todo acto por el cual se inflija intencionadamente a una persona dolores o sufrimientos graves, ya sean físicos o mentales, con el fin de obtener de ella o de un tercero información o una confesión, de castigarla por un acto que haya cometido, o se sospeche que ha cometido, o de intimidar o coaccionar a esa persona o a otras, o por cualquier razón basada en cualquier tipo de discriminación”. También incluye todo método que busque anular la personalidad de la víctima o disminuir su capacidad física o mental, incluso si no causa dolor físico o angustia psíquica.

Las afectaciones a la persona son diversas y profundas; y aunque está expresamente prohibida, su práctica y los malos tratos son sistemáticos en más de la mitad de los países del mundo, esto de acuerdo a la Oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas; por otro lado existen diversos instrumentos legales de nivel internacional y nacional que prohíben cualquier acto de tortura tal como es: el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos (artículos 7 y 10); Convención Americana sobre Derechos Humanos (artículo 5); Convención Interamericana para Prevenir y Sancionar la Tortura(artículo 2); Protocolo de Estambul.

Hace casi un año la Comisión de Derecho Humanos del Estado de Hidalgo (CDHEH) —bajo la visión de la Presidenta Ana Parra— creó la Unidad Especializada de Investigación en Tortura (UNIT) con la finalidad de abatir el rezago en los expedientes de queja relacionados con posibles casos de Tortura, tratos o penas crueles, inhumanos y/o degradantes; además de que no se contaba con el personal idóneo para la investigación de este tipo de casos, no existía un área técnica especializada para investigación científica de los expedientes de queja en las cuales se requiera la intervención de un perito o persona experta.

El equipo multidisciplinario que integra la UNIT fue capacitado por la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) a través del Mecanismo Nacional de Prevención de la Tortura, lo cual dio la pauta para iniciar con las operaciones en los expedientes que llevaban años de rezago (recordar que la tortura, al ser una violación grave a los derechos humanos no tiene un límite de tiempo para ser investigada, es decir no prescribe).

Cabe mencionar que el modelo de intervención de la mencionada unidad no solo se basa en la interacción de personal médico y psicológico, complementando con personal de diversas especialidades que investigue bajo diferentes perspectivas y aristas, lo cual marcaría la diferencia entre las unidades de investigación ya existentes dentro de diferentes organismos defensores de derechos humanos, lo que nos permite en Hidalgo mantenernos a la vanguardia y generar investigaciones más sólidas.

Recientemente, en rueda de prensa fue presentada la primera Recomendación correspondiente a un caso de tortura, acto que marca un precedente en la historia de la entidad, por ser la primera investigada y emitida por la Unidad Especializada de Investigación en Tortura (UNIT). Ana Parra, en compañía de Antonio Rueda Cabrera, representante de Rosario Piedra Ibarra, Presidenta de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos y del Mecanismo Nacional de Prevención de Tortura, hablaron sobre un caso donde se pudieron comprobar hechos de maltrato físico y psicológico que constituyeron tortura y otros tratos crueles, inhumanos o degradantes en agravio de una mujer transgénero privada de su libertad, que a la fecha se encuentra en el Centro de Reinserción Social de Tulancingo de Bravo.

Durante la investigación, esta Comisión, a través de la UNIT, se allegó de pruebas tales como copia certificada las Causas Penales, además de la aplicación de un Dictamen Médico Psicológico Especializado para Casos de Posible Tortura y Otros Tratos o Penas Crueles, Inhumanos o Degradantes mejor conocido como “Protocolo de Estambul”, el cual salió positivo. En tal virtud, la Recomendación R-TB-0007-24, es dirigida al jefe del Despacho del Procurador General de Justicia en el Estado de Hidalgo, en la que se establecen 5 puntos recomendatorios, entre los que destacan: Reparación integral del daño por parte de la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas del Estado, capacitación a personal de la Procuraduría General de Justicia de Hidalgo y la emisión de una disculpa pública.

La Rueda de prensa puede sintonizarse en las redes sociales oficiales de la CDHEH en el siguiente enlace: https://www.facebook.com/CDHEHidalgo/videos/480446961193871

Así mismo, la versión pública de las recomendaciones pueden ser consultadas en: https://cdhhgo.org/home/recomendaciones-2023-2/

En mi casa, tu casa… la casa de los derechos humanos ¡sí te creemos!