Estudiantes, padres y madres de familia de la primaria “La Reforma”, ubicada en la localidad de Dengantzhá, en Francisco I. Madero, solicitaron la intervención del gobierno estatal para frenar el despojo de una cancha por parte de ejidatarios, quienes quieren donar el área verde a la empresa Grupo Minero Vértice.
Con pancartas y cartulinas, el grupo de protestantes y alumnos se pararon en las escalinatas del edificio del Poder Ejecutivo de Hidalgo para pedir ayuda a las autoridades y poner fin al conflicto que afecta a más de 200 estudiantes, quienes ocupan el campo deportivo, que es posesión de la escuela y del que se cuentan con escrituras desde 1958.
En entrevista, madres de familia explicaron que los ejidatarios quieren el predio del campo para la empresa Grupo Minero Vértice, la cual se instalará próximamente en la comunidad para la explotación de piedra caliza.
“Es una empresa que se va a llegar a asentar en la comunidad, en el cerro, y como requisito le piden un hectárea de área verde y en corto se les hizo fácil (a los ejidatarios) dar el campo deportivo de los niños”, evidenciaron al señalar al comisariado Agustín Viveros, al delegado Rafael Santiago Martínez y al ejidatario Benito Rosas como los principales promotores del despojo.
Recordaron que la disputa comenzó hace dos meses cuando el Comité de Padres de Familia comenzó la construcción de una barda perimetral en la cancha; y el conflicto se agudizó el pasado 25 de julio cuando un grupo de ejidatarios destruyó los avances de la obra y bandalizó las instalaciones de la escuela, rompiendo vidrios, arrancando cámaras y agrediendo a padres y madres de familia.
Por lo anterior, las familias agredidas iniciaron las denuncias correspondientes en la Procuraduría General de Justicia del Estado de Hidalgo por daño en propiedad, amenazas y lesiones en contra de los ejidatarios de Dengantzhá.
Una comisión de padres y madres fue recibida por autoridades de la Secretaría de Gobierno de Hidalgo; hasta el momento continúa al interior del recinto gubernamental.