Por CDHEH

El concepto de “universalidad” fue formalmente consagrado en la Declaración Universal de Derechos Humanos (DUDH), adoptada por la Asamblea General de las Naciones Unidas en 1948, en respuesta a las atrocidades cometidas durante la Segunda Guerra Mundial. La DUDH establece que “todos los seres humanos nacen libres e iguales en dignidad y derechos” y que estos son “inalienables” y “universales.” La universalidad de los derechos humanos no es solo un ideal, sino un compromiso que las naciones han asumido para erradicar la discriminación, la injusticia y la opresión en cualquier forma que puedan presentarse.

Además, el principio de universalidad de los derechos humanos es uno de los pilares fundamentales del sistema internacional de derechos humanos y constituye la base sobre la cual se edifica la protección y promoción de la dignidad humana en todos los rincones del mundo. Este principio establece que los derechos humanos son inherentes a todas las personas, sin distinción alguna de nacionalidad, etnia, género, religión, orientación sexual, situación económica o cualquier otra condición. Es decir, estos derechos son válidos y aplicables en todas las culturas y sociedades, sin excepción.

A nivel local, este principio de universalidad cobra particular importancia en el trabajo que lleva a cabo la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Hidalgo (CDHEH). En un país tan diverso como México, donde conviven múltiples etnias, creencias y contextos sociales, es fundamental recordar que los derechos humanos no pueden, ni deben depender de condiciones específicas o de la voluntad del poder en turno. Todas las personas que viven, transitan o se desarrollan dentro del estado de Hidalgo y del país deben gozar de los mismos derechos y protecciones, independientemente de sus circunstancias.

Retos y desafíos para la universalidad de los derechos humanos

A pesar de su clara fundamentación, el principio de universalidad debe contemplar y abrazar a la diversidad cultural, que argumenta que los derechos humanos si bien es cierto, deben ser interpretados de acuerdo con las prácticas y valores de cada sociedad, y sin embargo este enfoque no puede ser una espada de doble filo: porque es importante respetar las particularidades como usos y costumbres de los pueblos, sin dejar de lado la universalidad de los derechos humanos, de tal forma este principio debe prevalecer cuando está en juego la dignidad y la vida de las personas. En este sentido la aplicación de los usos y costumbres de una comunidad no deben ser excusa para violentar el derecho humano de otras personas.

Otro desafío importante es la creciente desinformación y la percepción de los derechos humanos como un obstáculo para la seguridad pública. Esto es particularmente relevante en el contexto de la lucha contra el crimen organizado y la violencia. Sin embargo, es crucial recordar que el respeto a los derechos humanos no está en conflicto con la seguridad, sino que es un elemento esencial para construir una paz duradera. La universalidad de estos derechos exige que todos, incluyendo aquellos acusados de delitos, reciban un trato justo y humano.

El rol de la CDHEH en la promoción de la universalidad de los derechos humanos

Como órgano garante de los derechos humanos en el estado, la CDHEH tiene el mandato de promover y proteger estos derechos, basándose en el principio de universalidad. Esto implica no solo actuar cuando se reportan violaciones, sino también trabajar de manera proactiva en la educación y sensibilización de la población, de organizaciones civiles y de las autoridades de los diferentes niveles de gobierno (pueden consultar nuestra oferta educativa en: https://cdhhgo.org/home/wp-content/uploads/2022/08/Oferta_Educativa_SE.pdf).

Conclusión
La universalidad de los derechos humanos es, en última instancia, una manifestación del valor intrínseco de cada persona. En un mundo cada vez más polarizado y complejo, este principio nos recuerda que, por encima de nuestras diferencias, todas compartimos la misma dignidad y los mismos derechos fundamentales. La Comisión de Derechos Humanos del Estado de Hidalgo, consciente de su papel, continuará trabajando para que los derechos humanos sean una realidad para todas las personas, sin excepción.

Referencias
Asamblea General de las Naciones Unidas. (1948). Declaración Universal de los Derechos Humanos.