Con el inicio oficial de la carrera política por las 18 diputaciones de mayoría relativa y las 12 de representación proporcional en el estado, comenzó también lo más fuerte de este proceso del que serán muchos los aspirantes y pocos los ganadores, por lo que se espera una guerra de todos contra todos  al interior de los partidos y alianzas y entre los diferentes grupos rivales que buscarán seguir en ese tipo de cargos y los que ven la oportunidad de hacer lo mismo, ya que eso es lo que les permite el poder político.

Lo cierto es que, según especialistas en estos temas, lo que se avecina es una “guerra” de acusaciones y muy pocas propuestas, además de discursos y propuestas muy gastadas y usadas, pero que parecen ser las que menos efecto van a tener entre quienes van a tener la oportunidad de votar y de darle el beneficio de la duda no a los de siempre, sino a nuevos grupos políticos que esta vez -por fin- ven la oportunidad de llegar a los máximos cargos de poder; donde tampoco se descarta que quieran quedarse por tiempo indefinido como ha sucedido hasta el momento.

Los mismos especialistas han comentado a “De buena fuente” que la manera en que se han dado algunos movimientos, designaciones o imposiciones de candidatos le ha dado un vuelco total a la actividad política nacional y estatal, donde se afirma que en algunos partidos el exceso de confianza se ha comenzado a convertir en preocupación y hasta miedo de seguir adelante, porque hasta algunos que levantaban la mano para ser tomados en cuenta han comenzado a bajarla entre el panorama que ven en estos momentos en que se ven otras posibilidades.

Otros de los especialistas más arriesgados aseguran que hay grupos políticos que antes de tomar determinaciones ya tienen pensado aplicar no solamente un plan B, sino mucho más allá, como “enfermar” a sus abanderados en caso de que estos no les garanticen el triunfo o intenten saltarse de las normas por las que se rigen de forma interna, donde no les interesa más que el poder y mantenerse en el mismo sin importar las consecuencias; por lo que, según comentarios, hasta algunos aspirantes  ya toman sus debidas precauciones.

Lo cierto es que, con el inicio del proceso de elección de diputados locales, que se empata con la elección federal en la entidad de diputados federales y senadores, además de presidente de la República (1 de julio del próximo año), al menos en el estado se va a registrar una votación diferenciada  muy similar a la que se dio apenas en la más reciente de las elecciones para gobernador del estado, donde la población vota por un personaje para un cargo, pero para los demás entrega su voto a los candidatos de otros partidos políticos.

El voto diferenciado es un fenómeno que se espera aún más fuerte para el 2018, en el que las expectativas ya anunciadas son de que si bien no hay candidatos o propuestas que cumplan con las expectativas de la población, ya no se tratará de votar por el menos peor, sino por aquellos que dejen de mentir y burlarse de la población con falsas promesas o propuestas, ya que ha sido más que evidente para la población que prácticamente en todos los cargos se quedó a deber mucho más de lo que se esperaba y eso causa fenómenos como el del voto diferenciado.

Y sí hay ya algunos grupos que quieren hacer creer lo contrario por medo de encuestas a modo, lo que no quieren ver es que al igual que el manipuleo de la información todo eso ya pasó de moda porque ya se comienza a enfrentar a una nueva generación de votantes, muy difícil de sorprender y engañar.