Las circunstancias en que se encuentran muchos de los partidos políticos sin importar tiempos, la realidad es que estos de pensar en un verdadero cambio de fondo a simple y sencillamente están condenados a la extinción, algunos más pronto de lo que se imaginan, y otros más prácticamente se encuentran en la antesala de ser borrados del mapa político del país, y aunque no del estado, de alguna manera están condenados en desaparecer en el corto plazo.
En casos como el Partido Encuentro Social, donde ya se decía que estaban en plena etapa de consolidación y que incluso se convertirían ya en la segunda fuerza política en la entidad, finalmente solamente tiene como alternativa quedar en partido político local y después desaparecer sin dejar mayor huella que la derrota que sufrió uno de sus fundadores que jugó contrario a la dirigencia nacional de su partido, y que finalmente se quedó con las ganas de llegar al senado donde ya se veía incluso hasta en busca de nuevas aventuras políticas de más altura.
Otro de los que se encuentra en la misma cuerda floja y que incluso puede perder una de sus diputaciones locales plurinominales, es el Partido Nueva Alianza, el cual en sus inicios se presentó como una verdadera alternativa política que incluso en el Congreso local llegaron a ser a segunda fuerza política con seis legisladores por ambas vías, aunque después tres de ellos se declararon independientes porque se asegura que comenzaron a tener malas compañías, lo cual no les cayó muy bien y comenzaron a caer más pronto de lo que esperaban.
Tanto así que en la reciente elección en la que tenían anta confianza en recuperarse y regresar a los espacios políticos que alguna vez tuvieron, finalmente no fue así porque también se encuentran a punto de quedar convertidos en partido político estatal, ya que todo apunta que a nivel nacional no les van alcanzar los votos para poder conservar su registro lo que a su vez puede ocasionar que sean mal vistos por sus aliados, los cuales en estos momentos apenas comienzan a ver como se levantan de la lona, luego de la “golpiza” política que les propinó Morena, donde hasta candidatos sin campaña sabían que podrían lograr el triunfo.
Del Partido del Trabajo, que en los últimos días ha pasado por una de sus etapas más vergonzosas, hay muy poco que decir, debido a que a ese instituto político no le hacen falta enemigos, porque a pesar de haber logrado un repunte en estos comicios, en estos momentos no sabe qué hacer debido a la actuación de su principal impulsor Arturo Aparicio Barrios, quien desde siempre había sido señalado de todo tipo de abusos, hasta que por sí solo lo demostró, y hasta con creces, por lo que los politólogos aseguran que su caída y posible desaparición en el corto plazo es más que inminente.
Respecto al Verde Ecologista de México, que por milagro, según sus detractores, y hasta aliados en su momento, hay mucho menos que decir debido a que este no se puede ni parece que le preocupe quitarse el mote de partido satélite del PRI, o de todo aquel instituto político que tuviera las mejores posibilidades de triunfo, por lo que sí se mantiene o desaparece, a los únicos a los que les va a importar es a sus pocos integrantes y dirigentes que han sabido aprovechar todo tipo de cambio.
Del PRD, que sería motivo de más espacio de análisis, se asegura que sus intenciones han sido buenas, pero que han fallado algunos de sus dirigentes nacionales al imponer a candidatos y aliarse con los partidos equivocados al momento de la verdad, por lo que en caso de descuidarse un poco más su desaparición sería en un plazo más corto de que sus integrantes de imaginan.