El estudio para medir el impacto del horario que restringe la venta de alcohol en tiendas de conveniencia tuvo un costo de un millón 125 mil pesos, cifra que ya fue pagada a la universidad de Chicago, institución encargada para evaluar si hubo disminución o no de la violencia alrededor de estos negocios.
Además de este millón de pesos, se destinaron 13 millones más para la construcción de la primera guardería municipal que aterrizará la secretaría de infraestructura, lo anterior se reveló en comisión de hacienda, área del cabildo donde el tesorero Héctor Arrona abundó que al cierre de febrero del año en curso se había destinado una ampliación presupuestal de 53 millones de pesos de los cuales 38 corresponde a seguridad pública.
Asimismo, describió que se cuenta con hasta 10 millones de pesos -que es el primer paso- para dar pie al proceso de licitación del servicio de arrastre, es decir el proyecto para mejorar el sistema de grúas en la capital poblana.
“Es para tener suficiencia presupuestal, no significa que sean 10 millones de pesos, por ejemplo, para arrastrar un vehículo en la calle se requiere arrastre a cargo del ayuntamiento y para eso es el recurso”
Excesivo gasto de millón para medir horarios de alcohol
Sobre el tema del horario, el líder de los regidores del PRI, Iván Galindo Castillejos informó que es excesivo el millón de pesos destinado por el ayuntamiento de puebla para evaluar la medida.
“En el tema de la ampliación presupuestal la verdad nos toma por sorpresa porque es más estuditis, es parte de la dinámica de la administración, y además hacen profundos análisis de lo obvio, cosas que son obvias y que ya sabíamos lo que iba a pasar en las tiendas”
A la postre, señaló que nunca se les notificó sobre esta determinación formulada por la secretaría de gobernación cuando se supone que el área encargada es seguridad pública quien bien pudo hacer el diagnóstico.
“Además nunca se nos dijo. ¿Qué es lo que midió el estudio?: si tuvo impacto la medida, pero eso lo puede hacer la propia secretaría de seguridad con sus propios datos para saber si bajó o no durante la veda de alcohol y no precisamente la Universidad de Chicago”.
Al final, pidió que se le entreguen los resultados a la comisión y regidores para valorar si es necesario que sea una norma o impedir que siga.