La Secretaría de Desarrollo Rural, Sustentabilidad y Ordenamiento Territorial determinará en 60 días si los ejidos de campesinos cercanos a la planta de Volkswagen tienen daños como consecuencia del uso de los cañones antigranizo que usa la empresa, y deben ser indemnizados con el cobro del seguro catastrófico estatal.
Así lo informó el titular de la dependencia, Rodrigo Riestra Piña, al descartar que la armadora germana vaya a reembolsar a los agricultores por la pérdida de sus cosechas, pues los dictámenes de la Conagua, Sagarpa y otras instancias involucradas, concluyeron que los cañones no afectan la aparición de las lluvias.
Integrantes de la Unión Regional de Silvicultores del Iztaccíhuatl-Popocatépetl denunciaron que hay más de mil hectáreas afectadas; sin embargo, el funcionario estatal aclaró que los inspectores de las aseguradoras contratadas por el gobierno del estado ya realizan los recorridos de campo, a fin de detectar los daños a las cosechas.
Rodrigo Riestra confirmó que Volkswagen acordó suspender la operación de los cañones antigranizo para la protección de los vehículos fabricados en la planta, así como a mantener diálogo permanente con los campesinos inconformes.