Este 1 de julio de 2019, 36 instituciones de nueve países, entre ellos México, a través del proyecto HAWC, firmaron oficialmente un acuerdo para crear una nueva colaboración internacional con el objetivo de hacer la investigación y el desarrollo de la tecnología necesaria para construir un nuevo observatorio de rayos gamma de campo de visión amplio que estará ubicado en Los Andes y que cubrirá el hemisferio sur.
Este observatorio complementará al observatorio HAWC de rayos gamma situado en el volcán Sierra Negra, Puebla, en el hemisferio norte. Los países fundadores del Proyecto SWGO (Southern Wide field-of-view Gamma ray Observatory) son Alemania, Argentina, Brasil, Italia, México, Portugal, Reino Unido, República Checa y Estados Unidos. Con esto, se unifica una comunidad mundial alrededor del proyecto SWGO de diferentes grupos dedicados a este campo.
“Esta nueva colaboración nace principalmente del éxito que ha tenido el observatorio HAWC durante varios años de operación y explotación científica, usaremos el conocimiento adquirido en HAWC para poder construir un observatorio mas poderoso en el hemisferio sur, que no competirá con HAWC sino que serán complementarios para hacer un mapa del cielo completo”, afirmó Ibrahim Torres, jefe de sitio del observatorio HAWC y representante institucional por parte del Instituto Nacional de Astrofísica, Óptica y Electrónica (Inaoe) ante el proyecto SWGO.
Después de esta primera etapa de planeación y desarrollo, que durará un máximo de 3 años, se planea instalar el nuevo observatorio a una altitud mayor a los 4 mil 600 metros sobre el nivel del mar. Su posición en el hemisferio sur permitirá observar directamente una de las regiones más interesantes: el centro de nuestra galaxia, donde se encuentra un hoyo negro de cuatro millones de masas solares. Hacer observaciones con un instrumento de amplio campo de visión es ideal para estudiar fuentes variables en el tiempo y para buscar regiones extendidas de emisión como las llamadas Burbujas de Fermi alrededor del centro galáctico o buscar señales de la aniquilación de materia obscura, así como observar fenómenos inesperados.
Con ello, se busca investigar algunas de las interrogantes más apremiantes sobre nuestro Universo. Se observarán rayos gamma que son fotones, partículas de luz, billones de veces más energéticos que la luz visible y que permiten explorar los fenómenos más extremos del Universo, buscar los orígenes de los rayos cósmicos de alta energía y explorar la frontera de la física buscando partículas de materia obscura y posibles desviaciones de la teoría general de la relatividad de Einstein.
Para el grupo de investigadores en México, hacer un observatorio de la siguiente generación y con mayor sensibilidad en la Cordillera de los Andes “va a permitir observar continuamente toda la bóveda celeste en rayos gamma de la más alta energía”, aseguró el experto.
El nuevo observatorio detectará las partículas producidas en los chubascos atmosféricos al nivel del suelo, como lo hace HAWC, sin embargo, para ser diez veces más sensitivo, la colaboración desarrollará un nuevo concepto de detectores y diseñará una electrónica de procesamiento de las señales más sofisticada.
La participación de México en el proyecto SWGO es a través de un consorcio de instituciones representadas por el Instituto de Física de la UNAM constituido por grupos del Centro de Investigación en Computación, Instituto Politécnico Nacional; Facultad de Ciencias Físico Matemáticas, Benemérita Universidad Autónoma de Puebla; los institutos de Astronomía, Ciencias Nucleares, Física y Geofísica de la UNAM; el Instituto Nacional de Astrofísica, Óptica y Electrónica; la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo; el Departamento de Física y de Ciencias Naturales y Exactas, de la Universidad de Guadalajara; Instituto de Física y Matemáticas, Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo; la Facultad de Ciencias en Física y Matemáticas, de la Universidad Autónoma de Chiapas; y la Universidad Politécnica de Pachuca.