Hasta 6 años de prisión es lo que el gobernador del estado, Luis Miguel Barbosa Huerta propone como sanción para las personas que cometan actos de discriminación y agresión en contra de personal médico durante la contingencia sanitaria.
Ante el incremento en otras entidades del país, de las denuncias de agresiones en contra de personal médico por parte de personas que los responsabilizan de contagios del virus COVID-19 , el mandatario estatal busca evitar que se repitan casos en la entidad, por lo que busca aplicar sanciones severas para los agresores.
De acuerdo a la propuesta presentada este miércoles en la Comisión Permanente, la iniciativa de reforma al Código Penal del Estado propone que se apliquen de 3 hasta 6 años de prisión a quien realice acto de discriminación en contra de personal médico, cirujanos, enfermeras y enfermeros, así como todo trabajador del sector salud público y privado.
“Cuando la conducta sea cometida en contra de médicos, cirujanos, personal de enfermería y demás profesionales similares y auxiliares, del sector privado o público durante el periodo que comprenda la declaración de una emergencia sanitaria, la pena de prisión incrementará de tres a seis años”
Además de que se castigarán los delitos cometidos contra este sector en ejercicio de sus funciones o derivado de las mismas, se prevé que la pena aumente a lo correspondiente de acuerdo a lo que ya establece actualmente este Código Penal según sea el caso.
«Tratándose de delitos cometidos en contra de médicos, cirujanos, personal de enfermería y demás profesionales similares y auxiliares del sector público que presten servicios de salud en términos de la ley de la materia, que en ejercicio de sus funciones o derivado de las mismas, durante del periodo que comprenda la declaración de una emergencia sanitaria, la pena aumentará en un tanto, además de la que corresponda por el o los delitos cometidos».