El doctor José Sarukhán Kermes, coordinador de la Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (Conabio), consideró que el cuidado del medio ambiente y la biodiversidad, no sólo debe ser responsabilidad de la Secretaria de Medio Ambiente y Recursos Naturales de Hidalgo (Semarnath), sino debe ser competencia de todos sin importar la carrera que se haya estudiado o no, por lo que deben generarse políticas públicas que no vayan en contra de la conservación, preservación y del uso racional de los recurso naturales.
“Ciertamente es un proceso difícil, no hay una sola respuesta a esto, una de las cosas que debería pasar es que la responsabilidad del cuidado de la naturaleza y del medio ambiente, no debe ser y no puede ser responsabilidad de una sola instancia como Semarnath”.
Recordó que el tema del cuidado del medio ambiente y ecológico no nada más es materia de los ecólogos, los biólogos, sino que es materia de todos, sin importar la carrera que se haya estudiado o si no se ha estudiado, porque con nuestra actividad diaria estamos afectando el entorno.
Indicó que llevado a escala nacional, tiene que ver que las políticas públicas que se generan en diferentes instancias, no vayan en contra de la conservación, preservación y del uso racional de los recurso naturales.
“Hay muchos casos, y eso es lo que se trata de evitar, por eso el convenio entre Sagarpa y Semarnath y que no haya subsidios perversos que ayudan a que haya deforestación”.
Este acuerdo entre las secretarías de Agricultura y Medio Ambiente, es en el sentido de tener un sistema por el cual, la secretaría ya no da permisos para la expansión de la actividad agrícola en áreas donde Semarnath juzga que la biodiversidad se daña o se altera.
Sarukhán refirió que hay políticas que afectan al entorno, como trazo de carreteras o de obras públicas que no toman en cuenta el impacto ambiental que eso va a tener de manera realmente seria, y que puedan arrancar, o hacer la obra de tal manera que no tenga el efecto que iba tener de otra manera.
Manifestó que eso tiene que ser una decisión de Estado, de gobernanza del país que debería cambiarse.
Explicó que hay un capital natural en el país que no se ha aprendido a valorar adecuadamente, “y quienes tienen como patrimonio único ese capital, como los ejidos, o las propiedades que tienen una distribución de tierra, ese es su capital, no tienen un departamento en Pachuca o en Tuxtla Gutiérrez, tienen que vivir de esas cientos de hectáreas o X número de hectáreas que tienen, ese es su patrimonio, saben cómo usarlo, pero la sociedad no los valora, no valora esos productos”.
El investigador apuntó que cómo sociedad no hemos aprendido a valorarlo, y es una de las cosas que tienen qué ver con la educación, “tenemos que hacer ver y transmitir a la gente que ese capital de naturaleza, que ese ecosistema, esos bosques, la selva, los manglares, tienen un valor enorme que tenemos que proteger, porque también son cuestiones que nos benefician a todos, no nada más a los que viven ahí, sino a todo el país”.
Consideró que no hemos sido educados adecuadamente para eso, pues las escuelas no han hecho este esfuerzo y las mismas universidades no están entrenando a la gente adecuadamente, “a veces se sienten muy contentas cuando tienen la carrera de biología, pues ahí estamos enseñando estas cuestiones del medio ambiente, pero también se los deberían estar enseñando a los arquitectos, a los ingenieros, a los abogados, a los contadores, a todo el mundo”.
“No en la misma cantidad, no en los mismos elementos, pero si los conceptos fundamentales del impacto que tienen cualquier actividad humana sobre el medio ambiente”.
Opinó que no es fácil por lo cual debe haber una decisión gubernamental a nivel federal, estatal y municipal, porque ahí está el contacto más directo de la sociedad con la autoridad, “la educación tiene un papel verdaderamente crucial en esto y realmente sensibilizar a la gente de esto, pero también tomar políticas para que realmente esto ocurra”.
Destacó que el país tiene muchos ejemplos de hacer bien las cosas, en lo que se refiere a los cuidados del capital natural, hechos por comunidades, ejidos y por el gobierno o los gobiernos estatales, “tenemos que multiplicar eso”.
Invitó a que la gente entre la gente a la página de Conabio para enterarse de esos ejemplos, ya que está página fue calificada como la mejor de biodiversidad en el mundo, donde hay una riqueza de información y está traducida para que toda la gente lo entienda.
Por otro lado, al señalar la situación actual en materia de biodiversidad, recordó que los ecosistemas son la casa de las especies, por lo que si se quita un pedazo de ecosisitema, se le quita un cacho de casa a las especies, y a la mejor para algunas de ellas era su único espacio para vivir.
Expresó que la causa más importante de esa modificación es la expansión para la producción de alimentos, en la parte terrestre, y en la parte acuática también.
Apuntó que la sobre explotación y la contaminación está modificando severamente muchos ecosistemas, pero consideró que se tiene una gran ventaja al tener conocimiento de lo que está pasando.
Reiteró que el deterioro de la biodiversidad si es resultado de una expansión de la frontera agrícola y de un inadecuado manejo en muchas partes de los sistemas marinos, por ello resaltó que la buena noticia fue el acuerdo entre los secretarios de Agricultura y Medio Ambiente, de tener un sistema por el cual, la secretaría ya no da permisos para la expansión de la actividad agrícola en áreas donde Semarnath juzga que la biodiversidad se daña o se altera.
“Si tenemos buen conocimiento y hay voluntad política, los terrenos se van reduciendo y se van mejorando las situaciones”.
Por último, sobre el premio internacional Tayler que recibió, destacó que es el premio más importante en el área ambiental que hay, y quienes lo han recibido antes son personas que le generan un enorme respeto y una gran admiración.
Sarukhan Kermes es uno de los ecólogos latinoamericanos con mayor reconocimiento académico, por lo que es una autoridad en materia de biodiversidad.