La Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), recortó 285 millones de dólares del presupuesto para el bienio 2018-2019, por lo que fue celebrado por la representante permanente de Estados Unidos ante la organización, Nikki Haley.
El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, había solicitado un presupuesto de unos cinco mil 400 millones de dólares para el próximo bienio, unos 281 millones de dólares menos que lo aprobado para el bienio 2016-2017, pero la Asamblea General aprobó una partida presupuestaria de cinco mil 396 millones de dólares.
Haley a través de un comunicado dijo que este recorte es un gran paso en la dirección correcta, esto después de que el jueves pasado, amenazara a la UNO y a la comunidad internacional por emitir un voto de condena en torno a la decisión del gobierno norteamericano por reubicar su embajada en Israel.
“Cuando seamos llamados una vez más para hacer la mayor contribución a la ONU y lo recordaremos cuando numerosos países nos llamen, como a menudo lo hacen, para que paguemos más (…) la ineficiencia y el gasto excesivo de la ONU son bien conocidos, ya no permitiremos que se aprovechen de la generosidad del pueblo estadounidense” sentenció Haley.
Cabe mencionar que Estados Unidos es el mayor contribuyente de la Naciones Unidas, organismo con el que colaborar con el 22 por ciento del presupuesto básico.
“Aunque estamos satisfechos con los resultados de las negociaciones presupuestarias de este año, pueden estar seguros de que continuaremos buscando formas de aumentar la eficiencia de la ONU mientras que protegemos nuestros intereses” mencionó la representante permanente de Estados Unidos ante la ONU.