La selección de futbol de Irán completará su quinta asistencia mundialista en Rusia 2018 y segunda consecutiva tras Brasil 2014, de la mano del portugués Carlos Queiroz, que llegará con un estilo aguerrido y con rapidez.

Queiroz la inyectado un sabor positivo al juego de los iraníes, quienes desde Brasil 2014 han mostrado un crecimiento en cada una de las zonas. La experiencia de sus jugadores, los cuales el 70 por ciento milita en Europa, hace que el conjunto genera más confianza en sus filas.

Fue la segunda representación en clasificar a la cita rusa y lo hizo con una gama de futbolistas que han aprendido a manejar mejor las situaciones. Desde su primer mundial en Argentina 78, los iraníes supieron la magnitud de estar en la mira del mundo.

Desde esa competición no han pasado la primera ronda. En 1978 finalizaron en el sitio 14, luego en Francia 98, terminaron en la plaza 20, en Alemania 2006 en el 25 y en Brasil 2014 en la casilla 28.

Todo parece indicar que, a pesar de la visión y experiencia de Queiroz, en Rusia 2018 volverá a quedar en la misma posición.

El escenario luce complicado para los “Príncipes Persas”, ya que tendrán como rivales a Marruecos, España y Portugal, estos dos los más complicados para los iraníes, ya que ambos gozan de relevancia y trascendencia en este tipo de competiciones.