El presidente Andrés López destacó este jueves el «bienestar» en el país pese a la contracción de la economía mexicana en 2019, que fue del 0.1 por ciento, y dijo que le importa «mucho» la economía familiar.

El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) informó hoy en una estimación preliminar que el Producto Interno Bruto (PIB) de México se contrajo 0.1 por ciento en 2019, lo que supone una sustancial caída frente al crecimiento de 2.1 por ciento del año anterior.

«Ya se esperaba, pero están cambiando los parámetros para medir si tenemos bienestar en México. Y como yo tengo otros datos, puedo decirles que hay bienestar. Puede que no se tenga crecimiento pero hay desarrollo y hay bienestar, que son distintos«, dijo López en su conferencia diaria.

Dijo que esos parámetros, que ya existían, se volvieron la base, el fundamento para medir el desarrollo durante el que llama periodo neoliberal en México, en los últimos 36 años antes de su arribo al poder.

«Pero a mí no me importan mucho porque ya lo he repetido: porque crecer puede significar que haya más dinero en unas cuantas manos«, expuso.

Acusó que en el citado periodo neoliberal mexicano «ni siquiera hubo crecimiento y lo poco que hubo se acumuló en unas cuantas manos, entonces es muy importante que haya una mejor distribución del ingreso y que los beneficios lleguen a todos«.

El mandatario dijo sentirse tranquilo «porque abajo hay más capacidad de compra, no hay crisis de consumo (…)».

«Me importa mucho la economía familiar«, dijo López Obrador y recordó que «actualmente hay más dispersión de recursos para la gente pobre, ahora tienen la posibilidad de comer mejor«.

El «gobierno» de López ha implementado una serie de programas asistencialistas para gente de escasos recursos, estudiantes y adultos mayores.

López inició su mandato en diciembre de 2018 prometiendo que el país crecería un 4 por ciento en promedio anual durante su sexenio, que ha de culminar en 2024.

No obstante, durante el 2019 fue cambiando el discurso a medida que los pronósticos bajaban, y terminó afirmando que es más importante el bienestar y la redistribución de la riqueza que el crecimiento en sí.

La reducción del PIB del 2019 ocurrió ante la caída de las actividades secundarias (1.7 por ciento) y a pesar de los avances en los sectores primario (1.9) y terciario (0.5), en comparación con el año anterior y en cifras originales, señaló el Inegi este jueves en un comunicado.

El PIB de la mayor economía latinoamericana después de Brasil aumentó 2.1 por ciento en 2018 y en 2017, cifra inferior al 2.9 por ciento registrado en 2016 y al 2.6 por ciento de 2015.

Para los últimos tres meses del 2019, el Inegi estima un crecimiento nulo del 0 por ciento frente al trimestre anterior, con cifras ajustadas por estacionalidad.

El decrecimiento anual del 0.1 por ciento se ajustó a las previsiones de instituciones oficiales y expertos para 2019.

En su último pronóstico, el Banco de México previó un crecimiento de México entre un rango de entre -0.2 por ciento y 0.2 por ciento para 2019.

El mandatario mexicano anticipó que a futuro «sí habrá crecimiento» y por eso integró recientemente un gabinete para fomentar el crecimiento económico.

Para este 2020, analistas del sector privado consultados por el Banco de México (Banxico) pronostican un crecimiento de 1.08 por ciento, mientras que el Banco Mundial prevé un aumento del 1.2 por ciento a medida que repunten las inversiones. EFE