Cdmx a 26 de septiembre 2020.- El pleno del Congreso de la Ciudad de México realizó la Sesión Solemne con motivo del sexto aniversario de la desaparición de 43 estudiantes normalistas de Ayotzinapa, Guerrero.
Cada uno de los grupos y asociación parlamentaria fijó un posicionamiento con relación a los hechos ocurridos el 26 de septiembre del año 2014.
Por el grupo parlamentario del PVEM, la diputada Alessandra Rojo de Vega Píccolo, advirtió que a seis años de la desaparición de los 43 normalistas aún se desconoce qué sucedió, y los padres siguen sin saber el paradero de los estudiantes; “la justicia se ve lejos, y las discusiones políticas carecen de cualquier utilidad; ha sido la sociedad civil quien no ha dejado de alzar su grito, son ellos quienes han confrontando las investigaciones”.
“Debemos reflexionar sobre este crimen. Hemos escuchado el grito de sus familiares, que cuentan hasta 43, que piden justicia, y hoy no se ha logrado, hoy seguimos fallando. Deberíamos estar obligados a que quienes estuvieron implicados enfrenten las consecuencias, esto no puede estar impune. Es necesario se asuma la verdad si fueron grupos delictivos, si fueron fuerzas policiacas, si fueron las autoridades o se pusieron de acuerdo para llevar a cabo esta desaparición. Las autoridades deben investigar hasta la últimas consecuencias”, advirtió.
Enseguida, el diputado Miguel Ángel Álvarez Melo, de la asociación parlamentaria Encuentro Social, ofreció condolencias y respeto para los familiares de los estudiantes, “hoy conmemoramos estos hechos con tristeza; estos hechos no sólo afectaron a los estudiantes y a sus familias, sino a toda la sociedad. Estos hechos constituyen una afrenta a la vida institucional, a la democracia y al régimen de derechos que debemos alcanzar. Ayotzinapa es el recuerdo de nuestro fracaso como país”.
“Ayotzinapa es la factura que la clase política debe tomar en cuenta y pagarla con la verdad y justicia. La corrupción, el crimen organizado, la prepotencia y simulación de las instituciones se conjuntaron para recordarnos lo mucho que nos falta como país para alcanzar la paz, la reconciliación y el progreso al que aspiramos. Seguimos exigiendo justicia”, dijo.
Posteriormente, la diputada Jannete Guerrero Maya, del Partido del Trabajo, aseguró que la desaparición dañó a la sociedad en su conjunto, se afectó el tejido social, se mermó la confianza; “y es una vergüenza que el dolor haya venido desde el Estado”.
“Para ser una ciudad de derechos debemos comprender más de lo que hemos hecho. Hagamos la diferencia de quienes ignoraron, justificaron, o hasta revictimizaron, y trabajemos codo a codo con las víctimas, olvidemos construir verdades históricas que sólo buscan salvar a quienes las pregonan, y trabajemos en construir la igualdad y justicia”, indicó.
El legislador Tonatiuh González Case, del grupo parlamentario del PRI, les dijo a los familiares de los estudiantes normalistas “entendemos el dolor de quienes exigen justicia, y alzamos la voz ante estos hechos; nos solidarizamos con las familias de los desaparecidos y con aquellos defensores de derechos humanos”.
Refrendó su confianza en el Gobierno federal, porque se comprometió a realizar una investigación apegada a Derecho y encaminada a esclarecer los hechos que conduzcan a la verdad. “Se comprometieron a buscar a los culpables y hacer justicia para los estudiantes y sus familias. Es la oportunidad de esclarecer estos hechos. Confiamos en la sensibilidad del Primer Mandatario del país para cumplir con las promesas de dar certeza, tranquilidad y poner paz a esas familias”.
Por la fracción legislativa del PRD, el legislador Víctor Hugo Lobo Román, ofreció que desde la izquierda se dará la vocación, trabajo, solidaridad y compromiso para hacer efectiva la demanda de justicia, ya que la investigación continúa empantanada, y la exigencia de los padres sigue siendo la misma.
“Tenemos la obligación de alzar la voz, porque en lo que va de la presente administración van 27 mil 800 personas desaparecidas, a julio de este año. Hoy no sólo nos faltan 43, nos faltan miles personas que han muerto por el COVID, nos faltan las víctimas de los feminicidios. México tiene un gran dolor que nunca cesará”, señaló.
Después, el congresista Jorge Triana Tena, del PAN, advirtió que a seis años de los acontecimientos hay pocos avances en la investigación y muchas dudas de lo que ocurrió el 26 de septiembre del año 2014, “lo único que sabemos es que se trató de un crimen de Estado”.
“Esta administración se comprometió a demoler la verdad histórica, pero esta verdad histórica está demolida sólo en palabra, en los hechos no hay avance alguno en las investigaciones. Hemos fallado históricamente y esta administración no ha sido la excepción, no es lo mismo ser activista social que ser gobierno. No basta con hacer conteo del 1 al 43 para que se esclarezcan los hechos, no basta con alzar el puño izquierdo al momento de entonar el Himno Nacional para que aparezcan las personas que el Estado desapareció”, dijo.
Para cerrar los posicionamientos, el legislador de MORENA, Emmanuel Vargas Bernal, indicó que los acontecimientos golpearon a toda la juventud del país. “De un momento a otro los jóvenes desarrollamos la sensibilidad que nos había quitado el clima hostil y de violencia que desbordó la derecha, desarrollamos la capacidad de sentir la desgracia ajena, también la capacidad de sentir sed de justicia”.
“No podemos olvidar estos sucesos, porque al igual que los acontecimientos del 2 de octubre de 1968, la juventud mexicana fue criminalizada y reprimida su demanda por mejores condiciones de vida para todos y todas”, concluyó.