La etapa de embarazo en las mujeres es sin duda una de las más importante en su vida, pero antes de dar este paso, es sumamente importante preguntarse si su bolsillo está preparado para afrontar financieramente la llegada de un bebé, infortunadamente sólo el 10 por ciento de la población planea el embarazo por lo que no cuentan con un plan presupuestal que solvente gastos e imprevistos durante la gestación.
México ocupa el primer lugar en embarazos adolescentes, muchos de ellos no cuentan con una solvencia económica y menos con un presupuesto para el embarazo.
La ginecóloga Greter Arroyo Rendón, aseguró que en Chiapas la natalidad es tan alta que muchos de los hospitales no se dan abasto y explicó que el costo del embarazo dependerá si se realiza en una institución pública o privada.
Institución privada
Si se decide llevar el proceso de embarazo y parto de manera privada, se debe tomar en cuenta a qué consultorio y con qué doctor se atenderá, para de esta forma, estar preparada para gastos e improvistos.
Comenzando con 500 a mil pesos por consulta, debe realizarse cada tres meses como mínimo si el embarazo es normoevolutivo, se le agregan estudios de biometría hemática, general de orina y examen de glucosa que dependiendo el laboratorio es el costo, estos estudios oscilan los 300 y 500 pesos.
También deben comprar vitaminas, hierro y ácido fólico, la doctora recomendó un medicamento de patente por su calidad, que va de 500 a mil pesos. En caso de ser un embarazo con complicaciones los exámenes y estudios deben ser con mayor frecuencia, además de comprar medicamentos.
En institución privada el costo del parto dependerá de su modalidad, aunque te den un presupuesto regularmente sobrepasa éste, si es cesárea, por complicaciones, honorarios, pagos de ayudantes, medicamentos, material utilizado e instalaciones en caso de quedarse más tiempo el costo aumenta y puede llegar a un total de los 14 mil a 50 mil pesos. Sumando lo anterior, con los estudios y consultas, un parto sin ninguna complicación en institución privada va de los 16 mil a los 60 mil pesos.
Si la paciente necesita terapia intensiva el costo por noche en un consultorio privado va desde los 20 a 40 mil pesos por día, más medicamentos, monitor, oxígeno y personas que cuiden por turno.
Institución pública
Los gastos son mínimos para las pacientes, ya que las consultas y estudios, tanto de laboratorio como ultrasonidos, medicamentos y el parto corren a cargo de la institución, los únicos gastos puede ser en viáticos para acudir a consultas y urgencias, el problema que presentan la mayoría de estas instituciones es el desabasto en la farmacia, en caso de que esto suceda en el proceso algún familiar tendrá que pagar por el medicamento que requiera, además de tener que esperar a ser atendidas en todo momento por problemas de falta de espacio en las instalaciones. “Para una consulta regularmente hay entre 18 a 21 pacientes por turno por lo que es difícil atender a todas de inmediato”, agregó.
En caso de ser un embarazo de riesgo y tener que entrar a terapia intensiva, la institución lo cubre aunque no sea derechohabiente, gracias a un convenio nacional que se firmó cuando se pactó disminuir la mortalidad materna.
A pesar de que la institución cubre los costos de todo el proceso, existen gastos externos, desde una dieta diferente, medicamento o vitaminas que se compran en caso de terminarse o imprevistos, el costo de un embarazo en institución pública va alrededor de 5 a 10 mil pesos, ya sea proceso normoevolutivo o con complicaciones (amenazas de aborto, producto con malformación, infección, cuadros de apendicitis).
La doctora recomendó comenzar a tomar ácido fólico en cuanto se tenga una vida sexual activa, planear y hacer un presupuesto que cubra el proceso y contar con una planificación en caso de querer esperar a tener más hijos.
“Toda mujer en edad fértil que tenga vida sexual activa debe tomar ácido fólico según la Norma Oficial Mexicana, esto evitará algún tipo de malformaciones en el bebé”
