La celebración de los carnavales se ha convertido en un escaparate turístico y una derrama económica importante para los municipios de Hidalgo, esperándose este año una afluencia de medio millón de personas este año.

Es el caso del municipio de Omitlán, en donde el carnaval 2017, uno de los más recientes en el estado, fue visitado por mil 500 personas y este Pueblo con Sabor registró una derrama de 276 mil pesos, de acuerdo al alcalde, Ulises Hernández.

El éxito alcanzado en los municipios con carnaval ha hecho que el de El Arenal, que durante varios años no celebrara esta fiesta, la retome este año, se informó.

Febronio Rodríguez, alcalde de Tianguistengo, recordó que el pan tradicional es uno de los atractivos turísticos en este municipio y durante el carnaval los tahoneros elevan fuertemente sus ventas.

En el municipio de Zapotlán de Juárez no se celebraba esta “fiesta de la carne”; sin embargo la llegada de habitantes de la sierra y la huasteca han imbuido el gusto por la misma entre los zapotlenses, que este año estrenarán carnaval.

En Acatlán la fiesta se lleva en grande pues además de la participación de todas las comunidades, llega gente de los municipios vecinos e incluso de Veracruz.

Tepehuacán se engalana como sus comparsas y su música de viento, pero los turistas y visitantes aprovechan para disfrutar de ríos y parajes naturales que ofrece el lugar.

El carnaval de San Agustín Metztititlán se mezcla con los festejos del Señor de la Salud, y concentra a cientos de visitantes que llegan a pagar mandas, y de paso a bailar y comer las delicias del lugar, en una fiesta que de hecho ya inició en este municipio.

Los fuegos pirotécnicos, los carros alegóricos que engalanan esta celebración son también un gran atractivo, aunque en ocasiones sale más caro adornarlos que el premio en efectivo que reciben los ganadores, comentan los alcaldes.