Del mes de abril de 2017 al mismo mes en 2018 el valor generado por la construcción de capital privado registró en Hidalgo una caída de 8.76%, originada por factores como el alza en los precios de los insumos y el nuevo modelo de vivienda, medio residencial, impulsado; una industria que ha ligado 10 meses sin salir de los números rojos.

Cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), precisan que el valor de la obra privada en términos reales presentó variaciones negativas en la mitad de las entidades federativas del país, y en 13 de ellas la caída fue a doble dígito.

Fue el caso de los estados de Tlaxcala, con 58.69%; Guerrero, con 52.54; Campeche, con 46.52%; Puebla, con 40.10%, y Morelos, con 40.05%.

Cayeron también, con doble dígito, los estados de Querétaro, con 38.38%; Chiapas, con 37.92%;  Coahuila, con 29.18%; Durango, con 29.14%;  Sonora, con 21.52%; Nuevo León, con 15.30%; Sinaloa, con 12.19%, y Colima, con 10.78%.

Los estados en donde la caída fue de un solo dígito, son los de Hidalgo, con 8.76%; Tamaulipas, con 7.77%, y la Ciudad de México, con 3.85%.

Durante el período en cuestión, la caída más pronunciada por mes se presentó en septiembre del 2017, con 8.04%, de acuerdo a los datos proporcionados por el instituto.

En esta caída, señala el instituto, se debe especialmente a que en la capital del país y en el estado de Nuevo León se desplomaron de manera importante las obras privadas, y a que los crecimientos en territorio tapatío y mexiquense fueron marginales. Y es que se trata de las cuatro entidades en el país con mayor valor en el total nacional.

En estados como Nuevo León y en la Ciudad de México influyeron significativamente en la caída los incrementos en los precios de insumos básicos como el acero y el cemento, provocando que disminuyeran las construcciones con capital privado y, por consecuencia, el valor generado por las mismas.

Al respecto, el Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP), afirmó que esta tendencia negativa de la obra privada se debe una contracción del mercado al dejar de impulsarse la edificación de vivienda de interés social y promover la construcción de inmuebles de mayor valor para clase media, lo que provocó que empresas especializadas en el modelo de vivienda económica quebraran.

Sin embargo, inución en la caída, lo que es interpretado como el comienzo de una recuperación en la obra de construcción privada.