Pachuca, la cuna del futbol, se engalanó con la visita de grandes estrellas del firmamento del futbol, que vinieron a la capital hidalguense a su investidura en el Salón de la Fama, pero que antes de la ceremonia externaron sus puntos de vista sobre el balompié mundial, tanto del pasado como del presente.
María Eugenia “La Peque” Rubio, Silvia Neid, Rivelino, Cafú, Arlindo do Santos y Héctor Miguel Zelada sostuvieron un encuentro con la prensa, en la que una de las primeras mujeres internacionales del futbol nacional, la señora Rubio respondió que se encontraba orgullosa de haber sido invitada.
Marcos Evangelista, de todos conocido como “Cafú”, lateral brasileño que ya levantó dos copas del mundo, expuso que se trataba de un honor enorme estar en el Salón de la Fama recibiendo este homenaje sensacional y maravilloso, “porque todos como atletas nos sentimos orgullosos de ser parte de la historia del deporte, particularmente del futbol, cuando me invitaron acepté con mucho placer”.
Consideró que Roberto Carlos, Dani Alves y Marcelo, son grandes futbolistas brasileiros, que son grandes laterales y grandes potencias del futbol mundial, uno ya campeón de mundo y los otros con grandes condiciones para hacerlo, por lo que declinó a compararse con alguno de ellos.
La leyenda del Brasil campeón del 70, Roberto Rivelino, agradeció y expresó que se encontraba muy feliz, porque al encontrarse en México, todo mundo recuerda que tuvo un papel maravilloso aquí en el Mundial del 70, porque el público mexicano abrazó a aquella selección.
Se le pidió comparar a su compañero Pelé con Lionel Messi, a lo que repuso que para él, Pelé es de otro planeta, de otro mundo, y no se puede comparar a Pelé con cualquier otro jugador, porque ningún otro jugador va a hacer lo que Pelé jugando, “Pelé es de otro planeta, no tiene cómo comparar, pero Messi es un excelente y maravilloso jugador, tanto que es de los mejores del mundo actualmente”.
Antonio Moreno, dirigente de Mundo Futbol, indicó que Miguel Mejía Barón, uno de los investidos, declinó estar presente, porque no se siente merecedor de tal distinción, aunque no dejará de entrar al Salón de la Fama.
Campeón con Brasil en 1994 y 2002, Cafú estimó que lo único que le falta al Brasil actual solamente es ser campeón, y nada más, “no hay otra forma, más que enfocarse en lo que ellos quieren, que es ser campeón del mundo”.
Interrogado sobre el primer gol que se anotó en el Estadio Azteca, Arlindo dos Santos se sintió muy agradecido con Dios por ese gol en la inauguración del Azteca, porque fue algo muy esperado por él, ya que 25 días antes de esa fecha, había soñado con que había metido el primer gol, tal como hizo en el Maracaná su amigo y consejero Waldyr Pereira “Didí”.
“A 25 días en la inauguración del Azteca, yo sabía la historia que Didí había anotado el primer gol en el Maracaná, por lo que pedí 25 horas a Diosito que siguiera siendo el sustituto de Didí, a la mejor no fue el mejor gol, no fue el más picudo, pero yo pedía las 25 horas a Dios que quería ser el sustituto de Didí y gracias a Dios se me dio”.
Consultado sobre los cambios en el futbol, Roberto Rivelino opinó que el futbol brasileño tuvo una regresión, y actualmente pasa un momento difícil técnicamente, con problemas de juego y con problemas en la última Copa del Mundo donde Brasil no jugó un gran futbol.
“Pero el futbol de Brasil tiene que volver a sus valores, el futbol tiene que regresar a nuestros orígenes y a nuestro ADN, porque estamos muy preocupados sólo en defender, sólo en marcar, y el futbol brasileiro siempre fue de atacar, siempre fue creativo, y hoy estamos sufriendo mucho y estamos pasando por momentos muy difíciles”.
Cuestionado sobre su gran palmarés, Cafú no ocultó que se sentía muy orgulloso, al ser el único jugador mundial en la historia en disputar tres finales de Copa del Mundo seguidas, de las cuales ganó dos, y ser uno de los atletas que prácticamente conquistó todos los títulos existentes en el mundo.
“Me siento muy feliz, porque siempre fui un joven soñador que tenía pensamientos y sueños de disputar una copa del mundo, y de repente me veo disputando 4 copas del mundo y siendo uno de los jugadores que más vistió la camiseta de la selección, es una sensación de orgullo que no tiene tamaño”.
Por su parte, Silvia Neid, indicó acerca del futbol femenil mexicano, que hizo un buen papel ante Francis que es su ultimo referente, donde observó que las jugadoras técnicamente son bastante buenas, aunque les falta todavía camino por recorrer al ser un futbol muy joven, “pero creo que se está desarrollando bien”.
Cafú refirió que al levantar la copa del mundo, como hizo en 1994 y 2002, el mensaje para los niños cuando se levanta este trofeo, es un mensaje de sensación del deber cumplido, “cumplimos con nuestro deber con nuestro país, somos campeones del mundo, hice lo que tenía que hacer por mi país, creo que esa es la principal imagen y la respuesta que los niños querían escuchar de una persona campeón del mundo”.
“Así mostramos a ellos, que aunque vengan de barrios, de origen pobre, y donde no se tienen condiciones de realizaciones, puedes hacer realidad tus sueños cuando te concentras en ellos, en este caso jugar al futbol, y te concentras en tu meta que es ser campeón del mundo”.
Consultado sobre la gran final de Libertadores, Cafú reconoció que tanto River como Boca Juniors son las grandes potencias del futbol sudamericano, como otras grandes potencias del futbol en el cono sur, y están disputando la final como los dos mejores equipos sudamericanos.
En relación a la ausencia de México de Libertadores, observó que México tiene grandes equipos y una gran selección, además de que hay una gran dificultad al enfrentar equipos mexicanos, por lo que consideró que México debe volver nuevamente a las competiciones como la Libertadores, pues aunque no sabía cuál era el problema por el que estaba ausente, confió en que se resuelva y pueda retornar a disputar de la manera en que sabe.
Por su parte, el arquero Héctor Miguel Zelada, emocionado hasta las lágrimas, agradeció a Pachuca y al Salón de la Fama haber sido elegido este año, pues llegó por el trabajo realizado a través de estos años “en este país tan bendito”.
María Eugenia Rubio recordó que en sus inicios, el futbol femenil mexicano tuvo apoyo, aunque un poco con uniformes que luego les venían grandes, mientras Silvia Neid compartió que ella inició en el futbol desde los 5 años y desde entonces sus padres le apoyaron siempre, “siempre lo jugué con pasión y siempre tuve claro que quería ser parte de la selección nacional alemana”.
Antonio Moreno detalló que en esta edición, se homenajeará a Jorge “El Che” Ventura, y a Melquiades Sánchez Orosco, la voz del Azteca y quien anunciaba a los investidos, cuya voz se conservará en la investidura, pero ahora se sumará el connotado periodista Emilio Fernando Alonso.
Zelada trajo la presencia de Carlos Salvador Bilardo, al comentar una anécdota con el ex entrenador campeón con la albiceleste, en relación a que competía, aunque admiraba a Ubaldo Matildo Fillol, cancerbero argentino con quien se reflejaba.
Y al ser nominado como tercer arquero de la albiceleste, Zelada no dejó de reconocer en Fillol a su ídolo, a lo cual Bilardo le reprendió que si lo seguía nombrando, lo quitaría de la selección, porque lo ponía en ridículo al mencionar a Matildo Fillol como el mejor del mundo.
Rivelino, consultado sobre qué Brasil ha sido mejor, consideró que luego de hablar sobre el tema, todo el mundo dice que la selección del 70 ha sido la mejor de los cinco Brasil campeones y de todos los tiempos, “me siento muy honrado de haber participado en esa selección, con jugadores individuales maravillosos”.
Al hablar sobre lo que pasó a la escuadra alemana en el último Mundial, Silvia Neid observó que quizá el problema fue que se llevaron a jugadores que ya habían sido campeones del mundo, y les faltaba hambre de volver a ser campeones, además de quizá dos errores tácticos.
En cuanto al último mundial, Rivelino dijo que siendo honestos, ninguna selección mostró un futbol diferente, Francia fue el campeón del mundo, pero no trajo ninguna novedad en lo futbolístico, y aunque las selecciones tienen sus momentos, como se ve el futbol hoy, cualquier selección puede ser campeón del mundo, incluida México.
Por último, al preguntarles su posible valía en el mercado del futbol moderno y si eran injustos los sueldos actuales, con aplomo y sabedor del tema, Cafú dijo que no, porque todo tiene su momento y su historia, y todo su pasado, porque cada época tiene sus valores, y en el futuro tendrá valores diferentes.
“Nosotros ganamos el equivalente a lo que nos merecimos en nuestra época, y lo que nos fue propuesto”, y añadió, “son épocas pasadas, bonitas y agradables, pero decir que es injusto no sabríamos compararlo, creo que son épocas diferentes los salarios eran diferentes, cada uno gana proporcional a aquello que merezco, si me preguntan cuánto ganaría hoy, la respuesta sería, hoy ganaría más de lo que preciso, pero menos de lo que merezco”.