El 2018 fue un año en el que la industria, el comercio y los servicios no tuvieron el desarrollo esperado y, en algunos casos, sufrieron una recesión económica de fuerte impacto. Lo anterior, a causa de la suma de factores como la devaluación del peso frente al dólar, los elevados precios de los energéticos, alza generalizada de precios en insumos básicos, entre otros.

Reportes de organismos empresariales como las cámaras restaurantera, de comercio, de la construcción, de desarrolladores de vivienda, hoteleros y hasta parques acuáticos hablan de un bajo crecimiento a lo largo del 2018 y, en algunos casos incluso, de cierre de empresas y despido de trabajadores.

En el caso del comercio, el presidente de la Cámara Nacional de Comercio, Servicios y Turismo de Pachuca (Canaco-Servytur), Juan Jesús Bravo Aguilera, reportó  un 2018 “flojo”, con un aumento en las ventas en promedio anual del 6 por ciento, “pero afortunadamente no conocimos de cierre de empresas en el sector”.

No fue el caso, sin embargo, de la industria de restaurantes, cuyo representante, Alán Vera Olivares, reportó el cierre de diez establecimientos en el estado debido a las bajas ventas. Las elevadas tarifas de electricidad fueron factor determinante en este renglón, afirmó.

Además, imposibilitados para seguir absorbiendo alzas de precios del 10 y hasta el 50 por ciento en productos básicos, los restauranteros han tenido que ajustar sus precios al alza y ello ha disminuido la afluencia de comensales.

En la industria de la construcción dos años seguidos de recortes presupuestales en la obra pública y alzas en insumos básicos como el cemento terminaron por afectar a empresas del ramo, las que en muchos casos malbarataron maquinaria y equipo para sobrevivir.

El 2018 fue un año difícil para la industria desarrolladora de vivienda, pues el recorte que sufriera la bolsa de subsidios federales llevó a que por vez primera en su historia, Inonavit quedara abajo en un 12 por ciento en sus metas de colocación de créditos.

Sin este apoyo federal, que beneficia al trabajador, no al desarrollador, los trabajadores con salarios de hasta 2.6 veces el mínimo difícilmente pueden pagar la diferencia que existe entre el monto del crédito autorizado por el instituto y el precio de la vivienda”, explicó el presidente de la Canadevi delegación Hidalgo, Guillermo Juárez González.

La industria hotelera en el estado se vio afectada por las tarifas eléctricas y alzas en precios de insumos básicos, “pero lo que más nos afectó fue la oferta de hospedaje pirata, entre particulares”, señaló la presidenta de la Asociación Mexicana de Hoteles y Moteles, María del Ángel Sánchez Lozano.

El que tan solo en Pachuca se oferte hospedaje irregular, a través de redes sociales, de más de 180 espacios, desde habitaciones simples hasta un penthouse, afectó severamente a esta industria el año anterior en la realización de eventos de relevancia, como la Feria de Pachuca, “que son nuestras temporadas fuertes”.

Incluso el sector turístico más importante conque cuenta la entidad, el de balnearios y parques acuáticos, se vio afectado en 2018 por la debilidad de la economía en general, limitando su crecimiento económico a dos puntos porcentuales, según reporta la presidenta de la asociación que les representa, Anel Torres Biñuelo.

Este año -2019-, queremos intensificar nuestra promoción a través de medios digitales en mercados como el de Puebla, Tlaxcala, Querétaro y naturalmente, el Estado de México y la Ciudad de México”, aseguró.

Los distintos sectores productivos en la entidad diseñan estrategias que les permitan incidir en mayor desarrollo económico, como la instalación generalizada de terminales punto de venta en el comercio, convenios con proveedores para obtener precios más bajos para restauranteros, la posibilidad de importar cemento para la construcción de viviendas, la promoción de proyectos de obra necesaria en el estado y municipios, la realización de actividades artísticas y deportivas que atraigan a las familias a los centros acuáticos, entre muchas más.