Lejos de desaparecer, el subsidio a la vivienda de interés social debe ser incrementado hasta alcanzar el 40 por ciento que ostenta en países como Colombia, Chile o Brasil, pues es la manera de asegurar un bienestar, un patrimonio para las familias de menores recursos.

Respondió así el presidente de la Cámara Nacional de la Industria Desarrolladora de la Vivienda (Canadevi), delegación Hidalgo, Guillermo Juárez González, a la negativa del presidente de la república, Andrés Manuel López Obrador, de desaparecer este apoyo económico a las familias.

Juárez González recordó que el subsidio a la vivienda de interés social es “una herramienta en la comercialización de viviendas de bajo costo, que apoya de forma importante a las familias de más bajos ingresos para obtener una vivienda, un patrimonio propio”.

Esto será muy difícil de lograr al retirarse este subsidio, pues los trabajadores que perciben salarios inferiores a 2.5 Unidades de Medición y Actualización (UMAs), no cuentan con el ingreso suficiente para obtener un crédito de Infonavit suficiente parta cubrir el costo de la vivienda más económica, pese a que el precio de la misma está prácticamente sujeto a control oficial.

Es necesario encontrar herramientas que nos permitan atender las necesidades de vivienda de las familias de menores ingresos”, destacó el constructor.

Consideró un simple mito el que la vivienda de carácter social esté al alcande ce las familias que no están dentro de la economía formal, como se ha dicho.

Por otra parte, Juárez González destacó que la vivienda es un motor de la economía “y no se puede frenar bajo la visión de que los subsidios son para los desarrolladores, nada más incierto; los subsidios son para los compradores, para los trabajadores de bajos ingresos cuya capacidad salarial difícilmente les permite obtener el crédito suficiente para obtener una casa”.

“En otros países como Colombia, Chile, Brasil, el subsidio a la vivienda es de hasta el 40 por ciento del precio total, precisamente por el beneficio que este representa”.

Recordó que el que las familias cuentan con una vivienda digna, segura y con servicios, “procura el orden urbano, se evita la violencia y el hacinamiento; en otras palabras el subsidio no solo debe de permanecer sino incluso aumentarse para procurar satisfacción a las familias de menores ingresos”.

 

Apoyos gubernamentales a la vivienda

Mientras tanto, otros desarrolladores hacen notar que para beneficiar a la población de bajos ingresos, pueden sumarse los esfuerzos de los gobiernos estatal, municipales y de los desarrolladores.

De acuerdo a los desarrolladores de vivienda, reducir los trámites y los pagos por derechos en esta industria puede impactar muy positivamente en el precio de las casas.

Una alternativa más es proveer a los desarrolladores de reserva territorial de menor precio.

Coinciden industriales del ramo que el pago de derechos oficiales y la compra de terrenos llegan a impactar en el precio de la vivienda entre un 50 y 60 por ciento.