El Seguro Popular en Hidalgo informó que en el último año, fueron diagnosticadas con cáncer cervicouterino 438 mujeres afiliadas, quienes fueron atendidas en el Hospital General de Pachuca, mediante el Fondo de Protección contra Gastos Catastróficos.
Precisamente al conmemorarse el Día Mundial de la Prevención del Cáncer de Cuello Uterino, el Seguro Popular en el estado reconoció que esta enfermedad requiere de tratamientos de alto costo.
Abraham Rublúo Parra, director general del Régimen Estatal de Protección Social en Salud del Estado de Hidalgo, reconoció que los gastos de tratamiento por cáncer cervicouterino en ocasiones son impagables para la paciente y su familia.
Compartió que los tratamientos otorgados para atender a las mujeres que padecen este tipo de cáncer, se realizan en función de la evolución de la enfermedad; entre ellos el diagnóstico que presentan; la cirugía que requieren, misma que puede ser de cono cervical con asa térmica, traquelectomía, histerectomía total tipo I, II o III; además de las quimioterapias, radioterapias, seguimientos médicos y los cuidados paliativos.
Rubluó Parra destacó que todos estos tratamientos se realizan sin costo para las pacientes.
Explicó que estas 438 pacientes, en sus diferentes fases de cuidados médicos, recibieron gratuitamente un total 526 atenciones, ya que cada paciente puede recibir una o más atenciones según la evolución del cáncer que presenta.
El funcionario indicó que las edades de las pacientes afiliadas que fueron financiadas en el último año con estos tratamientos, oscila entre los 20 a los 88 años de edad, cuyo monto de inversión por la cobertura fue de 4 millones 491 mil 51 pesos.
El titular del Seguro Popular en Hidalgo exhortó a las mujeres a realizarse chequeos ginecológicos anuales, los cuales son de suma importancia para su salud, pues con ello pueden detectarse posibles enfermedades como cáncer de cuello uterino, el cual puede atenderse y curarse si se diagnostica a tiempo.
Cabe recordar que el cáncer cervicouterino es un tumor maligno que se inicia en el cuello de la matriz y es mucho más frecuente en mujeres mayores de 30 años.