Antes de iniciar la construcción del nuevo aeropuerto de Santa Lucía General Felipe Ángeles el gobierno federal concluirá con todos los requisitos legales necesarios para arrancar la obra, entre estos la declaratoria de impacto ambiental.
La semana anterior, durante la inauguración de una Feria Aeronáutica en Santa Lucía, se anunció que los trabajos de construcción arrancarían este lunes 29 de abril, pero se pospuso la fecha de inicio para el mes de junio a fin de estar en condiciones de cumplir con todos los requisitos.
La información más reciente al respecto indica que la terminal aérea se concluirá igualmente en el mes de junio pero del año 2021
Santa Lucía forma parte del proyecto integral del sistema aeroportuario metropolitano, que implica la adecuación e interconexión de las terminales de la Ciudad de México (AICM), Toluca y la que llevará el nombre del hidalguense Felipe Ángeles (Santa Lucía).
De acuerdo con el presidente Andrés Manuel López Obrador esa proyección supone el gasto de 28.7 por ciento de lo presupuestado el sexenio anterior para construir el Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM) en Texcoco.
En ese sentido López Obrador ya dio por cancelado en todos sus términos el NAIM y prometió, con base en la estrategia de su gobierno, sustentada en criterios de eficacia y austeridad, solucionar el problema de la saturación aérea.
El Presidente aseguró que para el proyecto de Santa Lucía ya se hizo una consulta y la población mostró su acuerdo.
La construcción tendrá un costo de 68 mil millones de pesos y estará a cargo del general Gustavo Vallejo, director de la Escuela Militar de Ingenieros.
Se prevé un diseño austero y funcional, con tres pistas y 30 posiciones de contacto, “dotado de los más modernos sistemas de navegación con altos estándares de seguridad; con nuevos procedimientos, como la navegación PBN, basada en la performancia (desempeño) de los aviones, donde además de la orientación satelital se siguen utilizando facilidades en tierra para la aproximación de los aviones”, según palabras del quien será el responsable de la obra. indicó el ingeniero. Será fácil de construir, sostuvo.
También se dio a conocer que en dos años estará lista la terminal con uso potencial de medio siglo y con capacidad, al inicio, de 20 millones de pasajeros al año y 190 mil operaciones anuales.
Incluso se garantizó el traslado de pasajeros –y vuelos de interconexión– del AICM hacia Santa Lucía, en Zumpango, estado de México, esto es, un tramo de 46 kilómetros que deberá recorrerse en 35 minutos.
De manera simultánea se planeará la construcción de una tercera terminal en la zona donde operó, hasta el sexenio pasado, el hangar presidencial para atender cómodamente a 50 millones de pasajeros al año (hoy son 48), así como la ampliación de capacidad de la terminal de Toluca, de 600 mil a 8 o 10 millones de pasajeros al año.
Por la cercanía con Santa Lucía se espera que cuando esté en operación dicha terminal aérea el estado de Hidalgo goce de beneficios comerciales y empresariales al considerarse como una sede conveniente para la realización de convenciones y congresos.
Además es de esperarse que los representantes de la industria de la construcción tengan cabida en el abastecimiento de materiales, maquinaria y mano de obra para levantar dicho proyecto aeroportuario.
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