Con la temporada de graduaciones escolares en puerta, el comercio tradicional de Pachuca se prepara ya para atender un incremento en la demanda de bienes y servicios de un 30 por ciento en promedio, que en el caso de vestidos de fiesta, zapatería, flores y regalos puede alcanzar hasta un 50 por ciento.
“Ver graduarse a los hijos ya sea de primaria, de preparatoria, contimás de una carrera profesional siempre genera una alegría, una satisfacción, y las familias hacen esfuerzos por festejarlo”, afirmó al respecto el consejero y expresidente de la Cámara Nacional de Comercio, Servicios y Turismo de Pachuca (Canaco-Servytur), Juan Jesús Bravo Aguilera.
Y es al Centro Histórico, “a nuestro supermercado más grande en Pachuca”, a donde las familias dirigen sus pasos para adquirir lo necesario para estos festejos, “y nosotros, como comerciantes, ya nos estamos abasteciendo para atender la demanda”, aseguró el comerciante.
“Por experiencia”, dijo, el comercio tradicional ya sabe cómo se festejan las graduaciones en jardines de niños, en primarias, secundarias, preparatorias y universidades, “y estamos listos para competir con el gran comercio con tres armas esenciales: calidad, precio y servicio.”
En esta temporada de graduaciones escolares, ya muy cercana, incrementan su actividad no sólo el comercio sino también el servicio: de renta de trajes, de banquetes, salones de fiesta, etcétera.
“En el centro somos comerciantes de experiencia que ya sabemos cómo y cuándo se vende más; que administramos las buenas rachas para sobrevivir en las temporadas en que las ventas se caen.”
Aceptó el comerciante que este primer semestre de la nueva administración federal no ha sido fácil: “incertidumbre económica, amenazas del presidente –Donald- Trump y demás, pero quienes ya tenemos experiencia como comerciantes, logramos salir adelante”, añadió.
Bravo Aguilera dijo desconocer que se hayan dado despidos en el comercio, “y si ha habido cierre de negocios es porque abren a la ligera, sin conocer el mercado ni un estudio que les respalde; venden cosas que resultan novedosas pero que no son del consumo habitual… y terminan por cerrar.”
Fracasan también quienes no saben administrarse; quienes se engolosinan con las emporadas fuertes y piensan que así ocurre siempre. “Quienes ya tenemos experiencia sabemos que debemos ser administrados y aprovechar las temporadas de vacas gordas para resistir en las de vacas flacas. Pero así es el comercio, ya lo sabemos”, insistió.