Luego de haber agotado los plazos establecidos para lograr una conciliación, el ex operador del Tuzobus, Federico Hernández Campos, solicitó a las autoridades federales que intervengan con la empresa Vanguardia y Cambio S. A. de C. V., por los despidos injustificados que ha realizado en menos de dos meses.

Tras haber acudido al tercer citatorio para llegar a un acuerdo con la empresa por la denuncia de despido injustificado que inició en la Secretaría del Trabajo y Previsión Social, el ex operador dijo que desconfía que su proceso se lleve a cabo de manera justa pues teme que las autoridades estatales protejan a la empresa concesionaria del Tuzobus, Vanguardia y Cambio.

En esta misma situación, comentó, existen cerca de seis ex trabajadores que ya iniciaron su procedimiento legal en la Junta de Conciliación y Arbitraje de la STPSH mientras que otros lo han hecho con la autoridad federal, de las cuales, uno ya cumplió su etapa de conciliación y estarán iniciando con la demanda pues el representante legal no acudió a ninguno de los tres citatorios.

En cuanto a sus compañeros que siguen laborando, dijo que la mayoría está en desacuerdo con las condiciones de trabajo de la empresa pues les impone largas jornadas de trabajo sin horarios para ir al baño o comer.

Niega SEMOTH quejas de operadores del Tuzobus

Hernández Campos relató que fue despedido el pasado cuatro de febrero, debido a que un día antes tuvo un incidente vial en la ruta alimentadora del Tuzobús 15B, que va desde la colonia Abetos a la Central de Autobuses de Pachuca, luego de que bajó para hacer sus necesidades y la unidad patinó y cayó en una zanja.

Comentó que este percance no dañó la unidad, sin embargo le informaron que si sería suspendido por tiempo indefinido aunque posteriormente lo despidieron con el argumentó que el acto se habría hecho “con alevosía y ventaja, atentando contra la empresa» y lo liquidaron con poco más de 10 mil pesos por cuatro años de trabajo.

Federico Hernández pide que la empresa le pague lo justo por el despido pues considera que no existen los motivos para considerar que se atentó contra la empresa “si eso fuera, también atentaría contra mi vida porque yo voy a bordo de la unidad”.