Semivacías lucieron las iglesias de Pachuca, durante un domingo atípico para la religión católica, ya que ante la contingencia debida al coronavirus COVID-19, la arquidiócesis de Tulancingo tomó la decisión de suspender las misas dominicales por tiempo indefinido en las parroquias que conforman esta zona.

En la puerta de la Basílica Menor de Santa María de Guadalupe de Pachuca, se colocó una lona, en la que se avisaba a los fieles que debido a la contingencia sanitaria por el COVID-19 y por las disposiciones emitidas por la arquidiócesis, se tomó la determinación de que los domingos, para la oración personal, estará expuesto del Santísimo Sacramento y sólo se dará la comunión a las 8:00; 9:30, 11.00, 14:00, 18:00 y 19:30 horas.

El aviso refirió que a las 12.30 horas el templo sería cerrado, para abrir paso a la celebración de una misa que todos los fieles podrán seguir a través de la página de Facebook @radioluzdeluz1.

Entre semana, la disposición es que de lunes a sábado estaría expuesto el santísimo sacramento y se daría la sagrada comunión a las 19:00 horas.

Se exhortó a los feligreses a estar pendientes de los servicios específicos que se darán durante la Semana Santa 2020.

La iglesia católica manifestó que estas disposiciones estarán vigentes durante todo el tiempo que dure la contingencia sanitaria, e hizo un llamado a extremar precauciones, evitando acudir al templo en caso de presentar fiebre, tos, estornudos o resfriado, mantener la sana distancia con respecto a otras personas al momento de visitar el templo y usar cubrebocas al interior del mismo, evitando todo contacto físico.

Y en efecto, adentro de La Villita, los fieles se encontraban a distancia conveniente unos de otros, y a la hora convenida los pocos fieles se formaron para recibir la comunión, quienes acudieron al templo a pedir la protección Divina, ante la pandemia de coronavirus que preocupa a la humanidad.

En el recorrido, se pudo apreciar también que la iglesia de El Carmelito, consagrada a Nuestra Señora de El Carmen, estaba casi vacía, salvo por dos hombres adultos mayores que se encontraban realizando oración, ambos muy separados, por lo que la iglesia parecía prácticamente sola.

En El Carmelito las misas se encontraban suspendidas por tiempo indefinido, hasta recibir nueva indicación.

Con pocos files también se apreció el templo de La Asunción, en pleno centro de Pachuca, donde se apreciaron medidas sanitarias más contundentes, pues a la entrada del templo una mujer dotaba de gel antibacterial a los fieles que ingresaban al templo, mismo en el que las bancas lucían clausuradas con cintas perimetrales, a fin de separar las bancas en que los fieles pudieran estar sentados con una distancia efectiva de un metro de separación.

Al igual que en las anteriores, las misas se cancelaron, y sólo se podía entrar a realizar oración, lugar donde estaban presentes en su mayoría personas adultas mayores, orando por la intervención del Señor para la protección de sus seres queridos y de sus familias, ante esta pandemia de COVID-19 que ha puesto las alertas con los tres primeros casos confirmados en la zona metropolitana de Pachuca.