Rodrigo Obregón Sánchez
Email: nudociegocolumna@gmail.com

Un tema que adquiere singular relevancia en los Países Bajos es el futbol. Hace más de un siglo se fundaron los clubes que se convierten en pilares del futbol holandés: Sparta de Rotterdam (1888), Ajax de Amsterdam (1900), Feyenoord de Róterdam (1908) y el PSV Eindhoven (1913). La rivalidad que existe entre estos clubes es legendaria. Por sus filas han pasado algunos de los más grandes futbolistas del mundo.

Existe un jugador que adquiere gran relevancia porque es a través del conocimiento que adquirió en su experiencia como jugador, que el día de hoy se le considera el fundador del fútbol moderno. Se trata de Johan Cruyff, jugador del Ajax que en su época logró conseguir todo a lo que podía aspirar un equipo europeo de futbol. Tuvo la oportunidad de jugar también para el Barcelona. Tal fue su influencia, que casi inmediatamente después de retirarse como jugador, recibe una invitación para integrarse como director deportivo del Ajax teniendo en el banquillo nada menos que a Leo Beenhhaker. Posteriormente se enrola como entrenador del Barcelona y es ahí donde empieza la leyenda.

En el futbol hay dos equipos que en su momento fueron considerados como los mejores del mundo, y curiosamente un elemento que los enlaza a ambos equipos es Johan Cruyff. El holandés fue el hilo conductor que llevó el futbol de ambos clubes a esferas no imaginadas. Los comentaristas de futbol señalan, de manera insistente, que la liga holandesa (Eredivise) es una de las ligas menos exigentes para los jugadores. Yo opino que es posible que no sea de las más espectaculares, pero sin duda es una gran escuela de talentos de manera que quiénes tienen la posibilidad de jugar ahí, adquieren habilidades indispensables para trascender en el medio.

El futbol en Holanda es una religión. Los seguidores de sus clubes han sido seguidores por generaciones. Los estadios de futbol no son solo un recinto dedicado a observar el juego, son mucho más que eso. Al interior de un estadio de futbol se viven diferentes tipos de experiencias.

Cuentan con diferentes secciones para disfrutar del juego de acuerdo a las posibilidades, existen restaurantes para comer antes del juego y después disfrutarlo con una copa de vino. Hay zonas destinadas a los patrocinadores y empresas, donde los RP´s se encargan de convidar a clientes y proveedores de manera que puedan compartir una de las más grandes experiencias deportivas en Holanda.

Los fanáticos no pueden adquirir sus boletos en las taquillas del estadio como normalmente lo hacemos en México, para poder tener acceso a los boletos es necesario que el aficionado se registre, es necesario que cuente con una tarjeta de fan registrado, con ella podrá adquirir su boleto para asistir al estadio.

Si uno va de visita y pretende ir a un juego, hay todo un protocolo que se debe seguir para conseguir boletos. En los estadios de Holanda, las cervezas solo se venden hasta el término del descanso de la primera parte del juego, posteriormente cierran la venta y es imposible conseguir una más. Las filas para adquirir las bebidas son bastante largas, así que en el mejor de los casos, te puedes beber sólo una cerveza.

Es así que los aficionados se reúnen en los bares alrededor del estadio, unas horas antes del juego, liban con singular alegría y después inundan las calles para dirigirse al estadio y disfrutar del encuentro. Un partido entre Ajax y PSV se convierte en una fiesta un tanto cuanto intimidante, de repente se iluminan las tribunas con bengalas de color y la cosa se pone medio desafiante cuando vuelan, las mismas bengalas, al terreno de juego. La porra del equipo visitante empieza a elevar sus cánticos de manera más agresiva que entonada y uno empieza a considerar que este podría ser el último partido que uno disfruta en su vida. Es ahí donde entra la policía.

En los Países Bajos, se encuentran los seres humanos más altos del mundo, el promedio. Y los policías son aún más altos que el promedio. Unos gigantes uniformados. La altura de la población es considerada un problema similar a la obesidad de este lado del mundo. Las mamás sufren cuando sus hijas rebasan el 1.80 m de altura y aún no llegan a los 15 años. Se convierte en un problema que les impide relacionarse adecuadamente.

Y siguen creciendo, el promedio de altura en la población sigue en aumento año con año. Curiosamente, las casas en Holanda son estrechas, las escaleras cuentan con una huella pequeña para nosotros, más aún con seguridad para los holandeses. Las fachadas de las casas con estrechas, «delgadas», esto es debido a que en el pasado, el cobro de impuestos estaba supeditado a la longitud de la fachada, es por eso que se hizo costumbre que las casas fueran tan alargadas.

La comida en Holanda no es algo que sea posible acostumbrarse de manera sencilla. La gastronomía holandesa es sui generis, una comida típica son las croquetas. Las croquetas son un preparado de una pasta que se fríe hasta dejarla crujiente, pero el relleno se mantiene con una consistencia entre líquido y sólido.

Los rellenos son variados, generalmente de un budín elaborado con diferentes tipos de verduras, carnes o la combinación de ambas. Después de unos días en el país, el paladar empieza a acostumbrarse y aceptar la comida de buen agrado. Los cortes de carne son una delicia en Holanda, de hecho, existen una buena cantidad de restaurantes con influencia argentina.

La combinación de la calidad de la carne y los preparados a la parrilla de la cocina argentina encajan perfecto en el paladar del consumidor holandés. Y algo que es indispensable nombrar son los quesos.

Existe una gran variedad de quesos de todos tipos y colores, los hay añejos, fuertes, curados y para asar. Y de ahí, se dividen en diversas categorías y calidades. En las ciudades existen boutiques de quesos, uno puede pasar para degustar la recomendación del mes del maestro quesero y decidir si se compra una lonja o dos. Holanda es un lugar mágico, se puede caminar con toda tranquilidad en las calles, los niños crecen con valores, se vive bien.

Si algún día tienes la oportunidad de visitarlo, hazlo, será una de las mejores experiencias de tu vida. Abrígate y disfruta.

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