Por: Bethel García Vargas
Hace un par de días el gobernador Omar Fayad informó de las nuevas medidas que se aplicarán para los comercios, principalmente para la industria restaurantera, los bares y las cocinas económicas en los 33 municipios en los cuales el Covid-19 ha pegado con más fuerza hasta ahora; dichas medidas propiciarán la reapertura de estos establecimientos en donde se plantea que tengan menor afluencia en sus espacios, acatando siempre las medidas sanitarias necesarias para que éstos lugares se conviertas en un punto de contagio alto.
Si bien el que a estos comercios se está dando luz verde para que vuelvan a “abrir para no morir”, como habían mencionado en diversas manifestaciones con el “cacerolazo”, es importante resaltar que con las nuevas plataformas digitales se puede registrar hasta la “tiendita de la esquina”, y con esto tener un mejor control de la distribución de alimentos, bebidas y demás productos para evitar aglomeraciones.
Personalmente, en la colonia en donde vivo dentro de la capital hidalguense se ha generado un grupo en donde nos encontramos gran parte de los vecinos y se anuncian los productos que venden, los servicios que se ofrecen, el cual para muchas personas, incluyéndome, nos han facilitado durante estos meses de pandemia evitar salir de casa para conseguir comida, o algún producto necesario en el momento, con las entregas a domicilio sin costo a distancias cortas y un pequeño costo extra cuando sobrepasan ciertos kilómetros, pero ¿no es mejor pagar un poco más a pagar un tanque de oxígeno diario durante al menos un mes?
Suena muy extremo y a lo mejor los que no se ha contagiado o han tenido algún familiar muy grave no se dimensione cuán caro es atender un familiar en casa y cuánto le cuesta al gobierno atender a un enfermo de Covid diariamente, pero la irresponsabilidad, las fiestas clandestinas y las reuniones “familiares” no ayudan a que las personas que dependen de los comercios que se habían quedado cerradas las últimas cuatro semanas pudieran reabrir y generar ingresos.
Solo queda esperar que estas nuevas disposiciones que se anunciaron el pasado viernes y comienzan el día de mañana la gente sepa acatarlas y no insistan en querer llenar un lugar porque serán las únicas personas ahí y todos se conocen.
Próximamente se realizarán las “bodas colectivas” en el marco del 14 de febrero, las cuales serán una celebración de amor entre dos personas que desean compartir la vida juntos, pero en este momento la forma más bonita en la que pueden celebrar es hacerlo en privado y sólo con las personas con las que han estado toda la pandemia, ya habrá tiempo para que se celebre “a lo grande”, primero habrá que proteger a los más vulnerables para que nadie más nos falte cuando todo eso pase.
Si van a pedir cosas a domicilio, cuando las reciban desinfecten todo, lávense muy bien las manos antes y después de recibir los envíos, usen cubrebocas y mantengan su distancia con quienes reparten, más vale prevenir que lamentar. Cuídense y a respetar el aforo a los lugares a donde vayamos.
bethgva@gmail.com