No, no pretendemos realizar, en este espacio, una apología de la obra del Nobel en Literatura Gabriel García Márquez “El amor en tiempos de cólera”, pero el título es ad hoc a lo que hoy viven quienes, por años, dedicaron su vida a la venta de todo tipo de artículos y enceres y de la nada, tuvieron que cerrar sus negocios, en virtud de que los objetos en venta, “no son bienes esenciales”.
Quienes tuvieron, por necesidad o por gusto, de formalizar un nuevo sistema de ventas, utilizando las herramientas de su propia creatividad, crearon grupos de venta, memes e imágenes llamativas, invitando a conocidos y amistades a participar, para publicitar sus productos y/o servicios.
Las grandes cadenas comerciales y de servicios de paquetería, crecieron como nunca antes en la historia, pero hoy nos referimos a las personas que, con valentía, emprendieron un camino hacia la subsistencia y en varios casos, la consolidación de sus negocios,
De manera general, podríamos encuadrar a tres grandes grupos, iniciando con los que crearon sus propios bienes, en muchos casos alimentos; en segundo lugar. los que vendieron bienes elaborados por otros (ejemplo la venta de ropa) y un tercer grupo, que teniendo mayores recursos, comercializó por grupos de emprendedores, logrando convertirse en operadores comerciales de los dos primeros.
Mauricio Candiani, empresario y conferencista de negocios, manifiesta que, en tiempos de incertidumbre, lo único seguro es “la inseguridad de no saber qué va a pasar”, por lo cual debes tener, además de creatividad, paciencia y apertura al aprendizaje constante.
La incertidumbre, en lugar de causarte ansiedad, debe de brindarte la seguridad de que el mercado está abierto para todos; por lo que las metas que debes fijarte deben ser sencillas y trabajar a través del ensayo – error, iniciando de inmediato y no dejar el negocio a la primera derrota.
Ninguna marca ha logrado subsistir de inmediato, por lo cual hay que ser tolerante a la frustración y paciente ante las vísperas de triunfo.
La inteligencia emocional es fundamental, pues tendrás que aprender a “navegar en la mar de las incertidumbres”, buscando llegar a puertos pequeños, hasta encontrar el tesoro final.
Si bien es cierto que las condiciones económicas del país son paupérrimas, y que, para lograr una percepción de una verdadera recuperación, depende en mucho de las políticas fiscales y económicas del gobierno federal, afortunadamente en México, al menos hasta el día de hoy, existen condiciones para emprender acciones y actividades, que puedan ser fuente de ingresos para ti y tu familia.
No desesperes, fíjate metas pequeñas, pero sobre todo, nunca pierdas la esperanza ni la visión de crecer en grande y a futuro.
Hasta la próxima.
Fb: Arturo Gb / Arturo Gil Borja
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