Ante la declaración de Mauricio Kuri, gobernador de Querétaro, de “si Hidalgo quiere agua, que construya un Acueducto”, la diputada Carmen Lozano señaló que está de acuerdo en que la entidad presente un proyecto de la “misma envergadura” a Conagua, a quien exhortó a ser imparcial y equitativa: “tanto Hidalgo como Querétaro necesitamos agua”.

En entrevista con medios comentó que hay un riesgo de conflicto social pero que se debe hablar de manera pacífica el tema y que los compañeros de Zimapán se han manifestado afuera de Conagua.

Afirmó que el gobernador del estado, Julio Menchaca, está interesado en que Hidalgo cuente con un proyecto sumamente importante que suministre a toda la entidad y que el costo podría ser el mismo que se planea para el Acueducto III de 12 millones de pesos: “si son 123 kilómetros, de ahí de ese punto a la cabecera aquí de Pachuca son 130 kilómetros, es lo mismo”.

Comentó que Zimapán tiene el problema de contenido de arsénico en el agua por una situación natural geológica, donde en la zona norte las rocas están constituidas con arcino pirita “cuando llueve ese elemento se va a los mantos freáticos, Zimapán no debe de tomar agua de ciertas zonas donde se extrae el agua”.

Por ello, dijo, se potencializan los problemas de salud pues la red hidráulica del centro de dicho municipio es muy vieja y se generan más problemas cuando el arsénico entra con el fierro.

Planteó la propuesta de que Querétaro se lleve la mitad de los 7 mil 500 litros que pide y la otra parte sea para Hidalgo. “Es un tema de equidad, de salud, de agua; no creo que el gobernador de Querétaro se vaya a oponer, ya le dimos chance diez años de que se volvieran sus mantos freáticos a abastecer, como él mencionó, y ahora nos toca a Hidalgo, vamos a defender a Hidalgo”.

Detalló, respecto al Acueducto II, que cuando se realizó se pactó 150 millones de pesos en infraestructura y no se cumplieron, pues “hay una red de 3 kilómetros tirada y se comprometieron a dar diez pipas a Zimapán, pero solo dieron 5”.