Por Alejandro Ordóñez

Vuelan brujas en escobas
diablos gordos con su trinche
después de esta vida chinche
nos esperan otras sobas

Fridita gritó feliz
esta muerte no mata
me encierran en un veliz
mas no he de estirar la pata.

Gran pintora surrealista
paisajista del dolor
vino a ponerle color
al partido comunista.

León Trotsky, el pensador,
al ver a la Frida, hermosa,
quiso llevarse a la moza
sin enganche, ni fiador.

 

Una tarde al dominguear
pasa Frida en su vitrina
va vestida de catrina
ya la llevan a enterrar.

La gente se arremolina
al paso de su cortejo
detrás de ella camina
Diego sapo, gordo, viejo.

Cuetes silbones al cielo
proclaman al estallar
México está de duelo
tengo ganas de llorar

Niña Frida, de mis ojos,
para de tanto sufrir
no hay cielo para nosotros
pero tienes que partir.

Ciudad de México, noviembre de 2023.