Pese a que en los últimos 10 años se presentó un crecimiento de 15.7 puntos en la tasa de participación económica de las mujeres, durante el 2020 más de un millón de dejó o perdió su trabajo.
Así lo dio a conocer el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) en su informe, publicado a propósito del Día Internacional de la Mujer, con el cual buscan ilustrar la situación de las mujeres en México en los ámbitos político, económico y social, considerando que el 51.2 por ciento de la población total corresponde al género femenino.
En el ámbito político, durante el 2018 una de cada cinco alcaldías estaba a cargo de una mujer, debido a que su participación paso como regidoras, síndicas o presidentas municipales de los ayuntamientos pasó de 25.5 por ciento, en 2010, a 44.9 por ciento del total de los ayuntamientos a nivel nacional, en 2018, mientras que en Hidalgo fue de 45.7 por ciento.
Por otra parte, se reveló que las féminas emprendedoras son propietarias del 36.6 por ciento de los establecimientos micro, pequeños y medianos de manufacturas, comercio y servicios privados no financieros; sin embargo, son en su mayoría informales, asimismo, tienen poco acceso al crédito para sus emprendimientos.
Las cifras revelaron que las mujeres propietarias contratan a más mujeres para trabajar, aproximadamente dos mujeres remuneradas por cada hombre, además, el 86.1 por ciento del personal en empresas con una mujer como propietaria, permanece empleado todo el año.
El Inegi realizó un balance familia-trabajo en el contexto de Covid-19, con el cual se dio a conocer que el 17.9 por ciento de los hogares están compuestos por una mujer sin cónyuge y con hijas e hijos, siendo un 73.6 por ciento de féminas quienes realizan la mayor parte del trabajo doméstico y de cuidados no remunerado en los hogares, lo que genera un ahorro para el hogar de 62 mil 280 pesos al año.
Finalmente, se detalló que, durante 2020, más de un millón de mujeres dejaron o perdieron su trabajo, lo que significó una disminución del 5.2 por ciento en la cifra de mujeres ocupadas; asimismo, se señaló que la brecha de género en la carga total de trabajo, remunerado y no remunerado, es de 13.4 horas semanales en promedio, siendo la mayor carga de trabajo para el sexo femenino, reflejada en menor disposición de tiempo libre con un promedio 4.2 horas a la semana.