Juan de Dios Pontigo Loyola, secretario ejecutivo del Consejo Estatal de Seguridad Pública indicó que la inversión en la segunda etapa del macromural de Cubitos fue de 4 millones 880 mil pesos, ya que se pintó 12 mil metros cuadrados en 162 casas, beneficiando a más de 262 familias, además de integrar otras acciones de cohesión social.
Explicó que este es un programa que se financia con un subsidio de ramo 4 que se llama Pronapred, que tiene que ver con abatir y erradicar la violencia y la delincuencia en ciertos polígonos que la propia federación determinó que estaban en condiciones de vulnerabilidad.
“Básicamente uno de los indicadores era la tasa de homicidios dolosos, y de otros bienes jurídicamente tutelados lastimados, como la vida y la salud”.
Expuso que para la bolsa federal este subsidio maneja 2 mil 015 millones de pesos y para Hidalgo destina 24 millones 585 mil 682 pesos, “esos 24 millones para Hidalgo, se dividen en dos municipios, que son Pachuca y Tulancingo, y ahí más o menos hay 13 millones en Pachuca, 11 en Tulancingo y se hicieron respectivamente 30 acciones en Pachuca, 26 en Tulancingo, 1 obra en Pachuca que fue la rehabilitación de una de las canchas en esta zona de aquí (Cubitos)”.
También se hicieron obras en Tulancingo, como la rehabilitación de los senderos de Napateco.
Precisó que no se trata de un programa de pinta de fachadas, porque refirió que mucha gente señala que cómo es que pintando una fachada se combate el tema de la inseguridad.
“Ya lo dijo el gobernador, es un programa que tiene cohesión social, que tiene intervenciones sociales, con simuladores de taller de humos, con un simulador de humo a través de la cabina, reincorporación escolar, reinserción escolar, evitar embarazos no deseados a través de simuladores de bebés virtuales, eventos que tienen que ver con deporte, cultura, salud, educación”.
Consideró que más allá de las acciones en el expediente, el mandatario estatal instruyó a meterse con todo el gobierno del estado para empezar a hacer acciones de manera sistemática y permanente que tengan que ver con la prevención del delito.
“El resultado es que se genera más cohesión social, más identidad, que los vecinos se conozcan, que cuiden el lugar que escogieron para vivir, que los niños sean herederos de un mejor entorno en donde desarrollarse”.
Sobre la segunda etapa del macromural indicó que se hicieron 12 mil metros cuadrados de pintura, con una intervención que beneficia a más de 262 familias, pintando más de 162 casas.
Explicó que en la segunda etapa se invirtieron 4 millones 880 mil pesos en el tema de la intervención social, pues al estar más alejado y más disperso esta etapa del mural, se decidió hacer un recorrido para dimensionar el tamaño de la intervención.
Indicó que se hizo un levantamiento, con una confiabilidad del 95 por ciento, donde se determinó que el grupo poblacional que mayormente habita la zona son mujeres, de las cuales un gran porcentaje son mujeres jefas de familia, que tienen más de tres hijos menores de 7 años y hay de una a 3 familias en una vivienda, y también hay mucha gente que vive en Cubitos no solo de otros municipios del estado, sino de otras entidades federativas que llevan asentados hasta 20 o 30 años.
Recordó que el proceso de esta segunda etapa, empezó con el Presupuesto de Egresos de la Federación del 2016, que había otorgado recursos para Pronapred en el 2016, pero al llegar la nueva administración, estaban por perderse esos recursos porque los expedientes los había generado el ex alcalde de Pachuca y Tulancingo.
Al venir el cambio y la veda electoral, esos recursos estaban por perderse, y el gobernador ayudó agilizó para hacer los tramites rápidos y en un hecho sin precedente, afirmó que la ejecución de los trabajos ya no fue parte del municipio, sino del gobierno del estado al convertirse en el destinatario de esos recursos a través de las universidades, de la Politécnica de Pachuca, de la Metropolitana de Hidalgo y la Tecnológica de Tulancingo, entre otras cuatro universidades.
“Con esa expertis pudimos agilizar los trabajos, y estuvimos trabajando aproximadamente un año en el cumplimiento de esta meta”.
Interrogado sobre si habrá etapas subsecuentes, señaló que dependen de lo que se autorice en el Presupuesto de Egresos de la Federación, pues desconoce cuánto les va a corresponder al momento de desagregar los recursos de la Secretaría de Gobernación y saber cuánto le va a tocar a Pronapred.
“Esperemos quie volteen a ver a Hidalgo, por el buen cumplimiento de metas, y n0s vuelvan a dar una cantidad para poder seguir con este trabajo”.
En todo caso, si hubiese una nueva etapa, Pontigo señaló que buscarían unificar la primera etapa con la segunda, para generar un macromural urbano que ya tenga una consistencia más holística y concentrada.